Invasión a la Tierra

Ataque alienígena a ritmo de videojuego

Invasión a la Tierra pone dos cosas de manifiesto, así de primeras: la falta de ideas que azota Hollywood y el éxito del cine más efectista. Con el remake de La Guerra de los Mundos aún fresco e, incluso, la insoportable Independence Day todavía en el recuerdo, parecía poco necesaria otra superproducción de invasiones extraterrestres. Por suerte Invasión a la Tierra es una película bastante aceptable, más incluso de lo que cabría esperar en un principio (seré sincero: mis expectativas ante una cinta así a estas alturas eran mínimas).

Lo nuevo del director Jonathan Liebesman (En la Oscuridad, La Matanza de Texas: El Origen) es, sobre todo, una película bélica. Y es ahí precisamente donde triunfa, en la forma vibrante y creíble con la que enfoca toda la acción, mostrada desde el punto de vista de un grupo de marines. Esto no quiere decir que la producción se libre de cargar con ciertos clichés y algún que otro momento exagerado típico dentro del género, pero en líneas generales el guión es bastante sólido y las interpretaciones correctas. Liebesman ha apostado por el realismo, con un estilo técnico rápido y crudo (en algunos casos casi rozando el documental, pero sin llegar a los extremos de la sorprendente District 9).

De hecho, el film empieza destacando sobremanera. La forma en la que narra cómo un grupo de misteriosos meteoritos llega la costa de Los Ángeles y, posteriormente, se descubre como una terrible invasión alienígena es verdaderamente inusual y verosímil. Por desgracia, y como suele ocurrir en casi todas las producciones actuales americanas (al menos en las de acción), termina cayendo en tópicos cada vez más previsibles a medida que se acerca el final.

Pero aún así, Invasión a la Tierra es una buena película de guerra. Tal vez podía haber sido algo más innovadora, de haber mantenido el acertado pulso con el que empieza, pero no deja de resultar de lo mejor del género dentro de lo que llevamos de año. Los efectos digitales, claro, mantienen un gran nivel en todo momento, por lo que es recomendable verla en cines. Seguro que en casa perderá bastante.