El libro de las casas encantadas

Imagen de Anne Bonny

Reseña de la antología compuesta, según palabras del editor Scott Allie, por “ocho relatos imposibles sobre espíritus, apariciones, y horrores de ultratumba narrados en palabras e imágenes”, publicada en España por Norma Editorial.

Scott Allie abre con esta antología una exitosa serie que revisa varios clásicos del terror a través de la mirada de distintos autores de cómic. Ya reseñamos en su momento El libro de los muertos y El libro de las brujas, y hoy comentaremos la obra original que propició que éstos existieran. Desde mi punto de vista, también es la más conseguida de la colección.

 

Abre la antología Ido, de Mike Richardson, Craig Russell y Lovern Kinzierski, una historia que podríamos denominar como la más básica de todas las historias existentes sobre casas encantadas. Curiosamente, esto no hace que sea tópica, sino más bien lo contrario. El dibujo, comiquero pero tendente al realismo, y el color, que resulta excesivamente crudo, a mi parecer, cumplen con un guión no carente de lirismo.

 

El experimento del Dr. Carp nos ofrece a continuación uno de los ganchos de la antología: una historia inédita de Hellboy de la mano de Mike Mignola que cuenta con un formidable coloreado de Dave Stewart. El guión es sencillamente genial, y pone de manifiesto cómo el autor es capaz de hilar una historia compleja, original y efectiva en pocas páginas. Una de las historias que más me han gustado de este autor y este personaje, y que cumple sin duda con su papel de baza fuerte dentro del conjunto.

 

Acto seguido tenemos un cambio de tercio con el relato La abadía de Thurnley, de Perceval London, una historia decimonónica en el más amplio sentido de la palabra, que en ocasiones resulta algo confusa, pero que se acepta como digresión en la antología por su espeluznante final y por los magníficos dibujos de Gary Gianni.

 

El relevo lo toma Un pequeño favor, una historia de Las huellas del diablo, un maquiavélico relato en el que el propio Scott Allie, con dibujo de Paul Lee y Brian Horton, y color de Dave Stewart, nos trae una nueva vuelta de tuerca al concepto de las casas encantadas. Sin duda, se ve que el responsable de la antología es un conocedor de este subgénero de terror.

 

Del mismo modo, Para siempre aborda otra faceta de los encantamientos, aunque en esta ocasión el anfitrión no tiene por qué temer por su casa. Con un guión -especialmente su final- más conseguido que el dibujo, a mi parecer, Uli Oesterle nos ofrece una historia fresca que hace el contrapunto a las más clásicas que le circundan.

 

La casa de la esquina, al contrario, nos trae el clásico más profundo de la casa encantada, hasta el punto de presentarlo, hasta cierto punto, con un tono documental. El dibujo de Lucas Marangon y el color de Jason Hvam plasman correctamente esta idea de Milton Freewater Jr., sin grandes aspavientos.

 

Como interludio tenemos una entrevista, algo que resultaría anticlimático sino fuera porque Salvando espíritus es capaz de poner los pelos de punta al lector tanto o más que algunas de las historias leídas. Las experiencias de L.L. Dreller no son para menos, y, sea como entretenimiento, sea como divulgación, no defraudarán al público.

 

A continuación, Mentiras, muerte y engaños olfativos de Randy Stradley, retoma con fuerza el tema de los aparecidos en una historia que aúna ternura y terror de un modo francamente efectivo. El dibujo de Paul Chandwick no es santo de mi devoción, pero con el color de Michelle Madsen consigue algunos efectos memorables en alguna viñeta.

 

Al cierre, como luego se convertiría en tradición, Callejeros, la historia de perros y gatos de Evan Dorkin y Jill Thompson, que con idéntico acierto en el apartado gráfico y en el narrativo, pone un broche de oro a una antología más que notable.

 

El conjunto queda sólido y bien hilado, bien distribuido a lo largo de las páginas y entretenido en todo momento. Algunos relatos resultan sobresalientes, como el segundo, pero sobre todo hay un buen nivel medio. Personalmente hubiera preferido dibujos más sombríos, pero éstos se adaptan a la perfección al tema, a pesar de todo, y los resultados son remarcables.

 

Sinopsis (Cortesía de Norma Editorial)

 

Ventanas oscuras. Cortinas raídas. Cristales rotos. Voces que retumban en salas vacías, puertas que se cierran con un golpe seco, chirridos a medianoche, llantos de bebés. Descubre los relatos más terroríficos sobre casas encantadas de la mano de grandes autores como Paul Chadwick, Jill Thompson y Mike Mignola.

Espacio patrocinado por

Nocte - Asociación Española de Escritores de Terror

http://www.nocte.es/

 OcioZero · Condiciones de uso