Pálido reflejo de unos ojos

Fue justo en ese momento de la noche en que las estrellas brillan con demasiada fuerza. En ese momento en que los sueños se rinden y vencen las pesadillas; en el que el miedo sale a buscarte guiado por los perros de caza de la nostalgia:

En el momento en el que descubres que el pasado ahogó al presente y no encontrarás alivio en el futuro. Cuando la alegría sólo puede hacerte daño. Durante el choque frontal entre el desasosiego y la calma. Cuando tus vicios juzgan a tus virtudes. Cuando los que podrían ayudarte están durmiendo. Cuando la noche derrumba los muros de tu indiferencia y la vida se fuga de su cárcel. Cuando has decidido vivir una vida nueva en el infierno. Cuando la demencia maltrata a la locura. Cuando los espacios en blanco te asaltan. Cuando has sentido tanto que te has roto…

Es el momento en el que un pálido reflejo aparece ante mis ojos. Cuando le pregunto a aquel espectro quién es, “soy el pálido reflejo de tus ojos” me responde.