Noche cerrada

Imagen de Patapalo

Reseña de la primera novela de Emilio Bueso, publicada por Verbigracia en su colección Perspectivas

 

La novela que nos ocupa en esta reseña marca su propio camino a su aire. Cuando la empecé y vi que como introducción se metía en las arenas movedizas de un diálogo -que suele ser un modo para presentar el escenario que, si das muchas explicaciones, resulta acartonado- no pude evitar ciertas suspicacias. Al avanzar y constatar la consistencia de los personajes y la facilidad con la que me sumía en la inquietante oscuridad del turno de noche en el servicio de vigilancia de cierta finca perdida de la mano de Dios, tuve que reconocer que mis dudas estaban infundadas: Emilio Bueso sabe contar una historia, domina el oficio.

 

Haciendo un resumen de la trama, o explicando de qué va, es imposible transmitir lo que realmente te cuenta la novela. Ésta es más que una narración bien pensada en la que se conjugan elementos de nuestro pasado reciente con otros de nuestra cultura y una serie de fenómenos inquietantes; es, de hecho, mucho más.

 

Noche cerrada es, precisamente, esa sensación de verse envuelto por una oscuridad que barruntamos hostil, es la inquietud, transmitida al lector, de verse encarado con un horror sobrenatural que ha tenido a bien meterse en nuestro mundo cotidiano. Lo es porque, al mismo tiempo, también es la camaradería extraña que se genera en ciertos oficios -en tiempos fui auxiliar de servicios, segurata que dicen, y he de decir que el autor plasma muy bien la sensación de vigilar cuando cae la noche-, el día a día, el pasado que nos persigue con sus pequeños detalles... haciendo que la parte terror sea no ya creíble -que poco importa-, sino vívida. Es esta conjunción en la que se plasma lo cotidiano y lo aterrador, consiguiendo contagiar a los lectores de las sensaciones, lo que constituye realmente la novela.

 

De este modo, las páginas se devoran, los pelos se ponen como escarpias y los personajes se graban en la memoria, dejando con ganas de más. Y, así, la novela funciona a la perfección como una historia de terror, muy nuestra, con pinceladas tan originales como espeluznantes, y terriblemente cercana.

 

Autor

 

Emilio Bueso (Castellón de la Plana, 1974) es un escritor de narrativa de terror contemporáneo de corte sobrenatural. Además, es ingeniero y trabaja como responsable de tecnología en una institución universitaria y como profesor en la Universidad Jaume I de Castellón. En el congreso HispaCon de 2007 (Sevilla), fue uno de los nueve ponentes, ofreciendo la conferencia La influencia del mundo árabe y mediterráneo en la obra de Lovecraft.

 

En el año 2007 publicó su primera novela, Noche cerrada. Ese mismo año fue finalista del Premio Avalón de Relato Fantástico. Desde 1997 participa en diferentes iniciativas literarias independientes y es miembro de Nocte, la Asociación Española de Escritores de Terror.

 

Sinopsis

 

El equipo de vigilancia nocturno de una finca rural en demolición es el testigo involuntario de excepción de una serie de macabros fenómenos que tienen su origen en un oscuro secreto.

 

Edición

 

Noche cerrada

Emilio Bueso

Verbigracia, 2007

Rústica con solapas

 

Conclusión

 

Noche cerrada es una buena novela de suspense y misterio. Su prosa es ágil y viene especiada con un tono directo algo gamberro -viene narrada en primera persona- que incentiva a seguir con la historia y que viene bien resuelta a pesar del riesgo que supone. Algunas escenas pueden parecer algo crudas, pero sin duda gustará a los amantes del género.

 

Su planteamiento es más bien clásico en cuanto a estructura y desarrollo, lo que no impide que Bueso deje bien clara su impronta tanto en el modo de contar las cosas como en su misma prosa. Sin duda, una novela muy entretenida y que deja unos cuantos recuerdos inquietantes.

 

Espacio patrocinado por

Nocte - Asociación Española de Escritores de Terror

http://www.nocte.es/

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