Walk like an egypcian

Imagen de Punkabbestia

Hablemos de las Bangles y las conjunciones cósmicas

 

En la década de los ochenta del siglo pasado las constelaciones que rigen los destinos de la humanidad se alinearon de tal forma que, según los inmortales cultos de Set, era evidente que nuestro final se acercaba. Las perturbaciones en la población en general, sobre todo en animales domésticos y norteamericanos, fue notable, como pone de manifiesto la descoordinación manifiesta a la hora de elegir hombreras, peinados y otros elementos estéticos que vemos reflejada en la mayor parte de los vídeos musicales de la época.

La Bangles, la intrépida formación que navegó entre las crispadas aguas del glam, el metal y el pop, no escaparon de estas terribles influencias cósmicas, y con la edición de este Walk like an egypcian (en clara referencia a una de las caras del faraón negro, Nyarlathotep) llegaron a perturbar de tal modo la coherencia del espacio tiempo que a punto estuvo de colapsar Nueva York al completo.

Al final, los elementos prosaicos de la existencia estabilizaron el mundo, pero aun podemos apreciar, en el siguiente vídeo, la fuerza de aquel momento. Quienes asistieron al rodaje del mismo, a veces de un modo casual, quedaron profundamente marcados. Entre ellos se encontraba un jovencísimo M. Shyamalan; la impronta dejada en su psique por aquellas danzas impías y asíncronas podemos rastrearla con facilidad en filmes como El incidente.

 

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