Capítulo Destino (W40Z)

Bueno pues os voy a Spoilear un poco con lo que se me ocurrió ayer por la noche para el concurso W40Z de ésta página (¡Ahora los demás participantes teneis ventaja sobre mí!). Lo hago para que la gente se anime.

Es sólo un borrador que tiene mucho que cambiar:

v\:* {behavior:url(#default#VML);}
o\:* {behavior:url(#default#VML);}
w\:* {behavior:url(#default#VML);}
.shape {behavior:url(#default#VML);}

Normal
0
21

false
false
false

MicrosoftInternetExplorer4

st1\:*{behavior:url(#ieooui) }

/* Style Definitions */
table.MsoNormalTable
{mso-style-name:"Tabla normal";
mso-tstyle-rowband-size:0;
mso-tstyle-colband-size:0;
mso-style-noshow:yes;
mso-style-parent:"";
mso-padding-alt:0cm 5.4pt 0cm 5.4pt;
mso-para-margin:0cm;
mso-para-margin-bottom:.0001pt;
mso-pagination:widow-orphan;
font-size:10.0pt;
font-family:"Times New Roman";
mso-ansi-language:#0400;
mso-fareast-language:#0400;
mso-bidi-language:#0400;}

Historia y organización

Capítulo nacido en los albores de la vigésimo tercera fundación, creado a partir de la semilla genética combinada de los Ultramarines y los Salamandras, con la intención de crear guerreros especialmente resistentes en condiciones extremas, incluso para los estándares marines espaciales.

Es un capítulo que ha mantenido siempre buenas relaciones con las autoridades imperiales y las ramas Malleus y heréticus de la Inquisición.

Se han labrado la fama de no mostrar piedad alguna ante El Gran Enemigo del hombre, así como de tener un alto sentido de preservación de la vida humana, habiendo arriesgado la vida de hermanos destinados para rescatar a unos pocos civiles o salvar a soldados de lo más bajo del escalafón de la guardia imperial que habían sido enviados a la muerte y/o abandonados a su suerte.

El capítulo muestra un odio sin límites por las manifestaciones caóticas, aunque la amenaza xeno no parece ser de especial prioridad.

Sigue la estructura organizativa del Codex Astartes en cuanto a distribución de escuadras y compañías pero no así con el número de compañías, pues según la época ha llegado incluso a las 15 compañías de 100 marines, aunque a veces ha quedado reducido a tan solo un centenar de hombres, aunque presentó una recuperación de efectivos aparentemente milagrosa en poco tiempo, debido, seguramente a la abundancia de semilla genética y a efectos de crecimiento de órganos acelerado que presenta una semilla genética combinada.

Heráldica

Su servoarmadura de combate presenta una combinación de colores sable en quijotes, grebas, escarpes, brazos, codales y guanteletes; y sanguíneo en peto, escarcelas y yelmo. El símbolo del capítulo es una guadaña alada de plata (blanco) sobre campo de su color (de compañía).

Los colores cuadran perfectamente con la mentalidad del capítulo:

Sable (negro):

·        El negro representa el poder, la elegancia, la formalidad, la muerte y el misterio.

·        Es el color más enigmático y se asocia al miedo y a lo desconocido.

·        El negro representa también autoridad, fortaleza, intransigencia. También se asocia al prestigio y la seriedad.

·        En heráldica el negro representa el dolor y la pena.

·        Puede dar imagen de elegancia, y aumenta la sensación de profundidad y perspectiva.

·        Combinado con colores poderosos como el naranja o el rojo, produce un efecto agresivo y vigoroso.

Sanguíneo (rojo oscuro): Es una variante de gules:

Gules (rojo):

·        El color rojo es el del fuego y el de la sangre, por lo que se le asocia al peligro, la guerra, la energía, la fortaleza, la determinación, así como a la pasión, al deseo y al amor.

·        Es un color muy intenso a nivel emocional. Mejora el metabolismo humano, aumenta el ritmo respiratorio y eleva la presión sanguínea.

·        Tiene una visibilidad muy alta, sinónimo de desafío y deseo de conflicto.

·        El rojo es el color para indicar peligro por antonomasia.

·        En heráldica el rojo simboliza valor y coraje. Es un color muy utilizado en los estandartes.

·        El rojo oscuro evoca energía, vigor, furia, fuerza de voluntad, cólera, ira, malicia, valor, capacidad de liderazgo. En otro sentido, también representa añoranza.

Designación de escuadras:

         El capítulo tiene un método propio par la designación de los marines espaciales. Esto es:

·        Destinados de  la tierra: Referido a los marines espaciales de las escuadras tácticas. “El soporte”.

·        Destinados del cielo: Referido a los marines espaciales equipados con retroreactores. “La ira”.

·        Destinados del viento: Referido a los marines espaciales equipados con motocicletas, motocicletas de ataque y Land Speeders. “La búsqueda”.

·        Destinados del fuego: Referido a los marines espaciales de las escuadras de devastadores. “La destrucción”.

·        Destinados de la guadaña: Referido a los marines espaciales equipados con armadura de exterminador. “La muerte”.

·        Destinados del agua: Referido a los tecnomarínes, vehículos terrestres del capítulo y a las cápsulas de desembarco. “El torrente imparable”.

·        Destinados de la providencia: Referido a los marines del apotecarium. “La eternidad”.

·        Destinados de la corona: Referido a los líderes del capítulo. “El Rex y la mente”.

Información interna

Lo dicho en el apartado de “Historia y organización” no podía estar más errado. El capítulo tiene su verdadero origen en plena Fundación Maldita, época en la que numerosos capítulos cayeron en la traición y la desgracia.

Sus integrantes no poseen una semilla genética definida, pues está formado por marines que otrora pertenecieron a infinidad de otros capítulos.  Ya fueran capítulos que abandonaron los ideales imperiales y se dedicaron a la piratería o peor aún, rindieron sus almas al caos, entre ellos quedaron hermanos que deseaban ser leales al imperio.

Esos marines espaciales, provenientes de muchos lugares de la galaxia y acechados por la muerte, pues eran perseguidos por sus antiguos compañeros traidores y por las fuerzas del Imperio, fueron “llamados” todos a un lugar perdido entre las estrellas donde se encontraron y gozaron de seguridad.

En un sinfín de cruzadas individuales, de búsquedas y de huidas sin fin, al fin unos pocos de los llamados, llegaron al lugar donde habían sido convocados por una fuerza superior que resonaba en sus mentes. Muchos de los que emprendieron la búsqueda de ese “nuevo hogar” perecieron víctimas de los horribles peligros que les acechaban.

El lugar al que llegaron, se encontraba desprovisto de enemigos, en un punto ciego del espacio, fuera de la vista de psíquicos y Astropatas, en el borde de La Tormenta de la Ira del Emperador.

Su sorpresa fue mayúscula por dos partes. Primero, la fuente que les había llamado se trataba de un antiguo bibliotecario que ya caminaba por el mundo cuando ocurrieron la Gran Cruzada y la Herejía, las épocas de las Legiones. El cuerpo del bibliotecario se encontraba encerrado en el sarcófago blindado de un Dreadnought.

Pero lo más sorprendente era la identidad del psíquico, pues era uno de los hombres que participaron en el abordaje y huida de la fragata Einsestein, alertando a Terra de la inminente invasión de las legiones traidoras. Había sido uno de los Leales entre Traidores. Como ellos lo eran ahora.

El bibliotecario les explicó que sirvió en Terra durante el asedio vistiendo los colores prestados de los Puños Imperiales, la Pretoriana, y tiempo después fue utilizado por la Inquisición como Oráculo y arma definitiva en el campo de batalla. Un papel que no estaba dispuesto a cometer, así que con ayuda de su reputación y sus poderes mentales, consiguió influir en las mentes de algunos tecnosacerdotes y soldados y planeó su fuga.

Un bibliotecario en un dreadnought que recuerda una época de leyendas, una fragata en malas condiciones llena de cadáveres enmohecidos de los que le ayudaron a escapar de su cautiverio, unos pocos vehículos medianamente funcionales y 127 marines espaciales sin Patria ni Mundo Natal con una meta: Servir al Imperio.

         El trabajo de los tecnomarines que habían llegado, las escaramuzas en pequeñas naves que utilizaron para encontrar la fragata y ahora utilizaban para la busqueda de suministros, y los esfuerzos de los cada vez más humanos y Astartes que se unían a ellos, finalmente se vieron recompensados cuando habilitaron totalmente la fragata, ahora conocida como “Memoriam” y pudieron emprender por fin la lucha contra los enemigos, nuevos y viejos del Imperio.

         Conforme crecía su leyenda, cada vez más se unían a ellos. No solo marines, sino también restos de flotas casi destruidas y ejércitos imperiales que habían perdido su mundo natal mientras guerreaban en los confines del universo. Las cifras de marines se elevaron a cerca de 500. Contaban entre ellos a cuatro dreadnoughts aparte de El Antiguo, una docena de armaduras de exterminador, 6 apotecarios y 10 tecnomarines. Y las cifras de guardias imperiales y otros humanos ascendían a 10 millares.