VII Edición de las Sortija

NEW LOVELY SHOW
Por la pasarela de Cibeles desfilaban las más elegantes modelos internacionales. Era un gran honor para ella lucirse allí. No comprendió bien las carcajadas que de repente se suscitaron a su paso hasta que miró hacia atrás y vio el papel higiénico seguirla por todo el recorrido.

Informe 12/34: La muerte

Todos acaban igual. Stop. Y luego, les lloran, les recuerdan, les entierran, les queman y les vuelven a llorar. Stop. No, no se los comen, compañeros. Stop. Están locos estos europeos. Stop.

On / Off

Llevaba ya cerca de veinte años dentro de un coma irreversible, conectado a una máquina que le permitía respirar y le controlaba los signos vitales. Todas las noches, su harta esposa pulsaba el botón de apagado. Todas las mañanas, la máquina volvía a hacer beep... beep... ¡Qué cabrón!

Wikileaks antiguo

A la Virgen nadie la preparó para las habladurías, mofas y el desprecio de sus congéneres. Tampoco para cargar con ese aprendiz de carpintero que no conocía mujer y sí muchos hombres. Así los ángeles tuvieron que ejercer de psicólogos con ella al principio para luego extorsionarla.  

Amén.

Se me adelantaron. Edito y hago humo.

LA CARRERA DE LA VIDA

Todos los días corríamos diez kilómetros. Primero, en un parque, luego, alrededor de cimientos, de chalets, de derrumbamientos, de piscinas, de cines y de plaza pública, siempre con el mismo recorrido desde que empezamos hace tanto que no puedo acordarme.

Cuidado

Puede parecerte improbable que salte desde el Empire State, que me trague un sable hasta que parta mi interior en dos o que me queme a lo gonzo en mitad de la Gran Vía; pero si no me dices que sí, preciosa, será más viable que un verano caluroso.

Yonqui

La abuela era cojonera por defecto. «Que si haz esto, lo otro», «Estudia, céntrate…». Yo siempre me reí de ella y por eso nos odiábamos, o eso pensaba, hasta que fue ella la que me rescató y de una patada me sacó del túnel que me transportaba al cielo.

                                                            CÓSMICO

Una escalera sin fin que ascendía hacia el cielo alrededor de un inmenso falo. Los vistosos trajes de los sacrificados hacían que pareciera una serpiente viva. La nube bajó hacia el falo que la penetró. De la garganta de todos surgieron gritos salvajes de placer cuando la embistió derramándose.

PARECÍA BUENA PERSONA

Sus vecinos decían que les parecía increible que hubiese podido hacer algo así.
La gota que desencadenó la tragedia fue que a su mujer se le quemaron las lentejas.
Siempre me pregunto, si la gente espera que los asesinos lleven un cartel en la frente.

No fijarse en el barrio en el que se está

La joven paró el cochazo y, como era día de los inocentes, preguntó aquello de que "busco a Jack". Una avalancha de manos se aferró a sus tetas para magreárselas un rato, el suficiente para salir de allí echando chispas.

PASIÒN NOCTURNA

Bajaba altiva las escaleras miràndoles a todos a los ojos, desafiándoles a que dijesen algo.
Nadie se atrevió, a pesar, de que no habían dormido en toda la noche.
Ella amaba así.

Revolución interior

Observaba, con ojos vidriosos, a la enfermera que aguardaba junto a él. Su mirada destilaba el sufrimiento que encerraba en su cuerpo, pero ella le conocía, y sabía que había estado toda la vida en contra de ese derecho. Ahora no iba a ser diferente.

Liberales

Guille observó el tarro roto, los cristales desmenuzados y la mermelada derramándose lentamente por el borde de la mesa. Sabía que no serviría de nada pero seguía intentándolo. Sus amigos no lo entendían, pero a él a veces le gustaría tener unos padres que si creyesen en los castigos.