VIII Edición de la Sortija - Día 3 de abril, de 20:00 a 21:00, HORA FELIZ

Ya, Tolia y no veas cómo la gocé 

Palabra: mundo.

EL CAMALEÓN EQUIVOCADO

Estaba cansado de aguantarlos en el patio, durante los exámenes, humillándolo a la menor ocasión. Había decidido camuflarse con el entorno y pasar desapercibido lo que quedaba de curso. Dentro de unos pocos años dejaría de estudiar y el mundo de los que abusan se desvanecería.

No imaginas cuánto me alegro, Ricardo, de que hayas podido rematar felizmente la historia que inicié. Ahora... que no pase aquello que tan bien conoce la sabiduría popular: "¡Otros vendrán que bueno te harán!" 

No me importa siempre que acaben muerrrrtos los corruptosssssssss... una y otra vez... 

Palabra: problema.

Delicias Monacales

Bocaditos de Almendra, alegrías de convento, suspiros de monja, delicias de pera y nevaditos de San Agustín. Eran parte de los tesoros que, entre hermanas y novicias, tenían siempre preparados para la satisfacción del Abate y de los monjes del cercano Monasterio.

Delicias monacales (II)

- ¡Docogro, egtoy (hip)cegrado aguí abajo, buede oigme agguien!

Guién be bandaba entrarg en da dagriztía (hip), di ya be habían ditio gue egtoz bonjes dregogían bedos didrero gon el guepilio gue ud imfectogrg de hagienda hodesto. Ahoga, fino zi gue daben gacegr egdos gabrodnes (hip).

SEGURIDAD PERDIDA

─No tengo miedo. ¡Déjame! Debo ver qué ha sido eso ─dije, saliendo valiente al bosque circundante.

Cuando vi los ojos rojos en la oscuridad corrí hasta la puerta cerrada. Aunque imploré no se abrió. Rogaba mientras ella suplicaba que me fuera. No podía dejar entrar a un cobarde.

Obsesión 
La chica de la barra dejó que me acercara. Al principio le asustó mi aspecto, pero mis palabras penetraron en sus oídos como un mantra hipnótico. Salimos juntos. No vio como apretaba mi set de costura en la mano. Su cara de ángel, es todo lo que quiero.

Pronto volverán las justas

Y quedaron flotando en el aire las ganas de hacer, el afán por ser. Viendo mutar los minutos, convertidos en horas por la desidia de la desocupación… en días muertos esperando a la batalla.

                Soldados desconocidos

Observó la escena tras la batalla, decenas de cadáveres yacían sobre el lodo rojizo. No parecía haber nadie más contemplando el cementerio desnudo. Avanzó enfangándose en vísceras y fue saqueando los cadáveres. Juntó todo lo recogido y lo apoyo contra un árbol. Había recuperado a su hermano perdido.

Enhorabuena a tod@s, ha sido una sortija de una nivel estupendo. Al menos, así se lo ha parecido a Pavi. 

Claro, claro, Pavi tampoco puede comparar, pues es tan novato como Don Komodo. 

Ohhhh... ya ha acabado??? 

Jo, cómo me he divertido... se me han hecho cortas 

Mira que soy inocente que me lo había creído

Gracias a todos los participantes: me lo he pasado en grande.