Una religión y una iglesia a vuestro gusto

Bueno yo sigo "la iglesia budista" así que no necesito inventarme nada más acorde a mis necesidades, no obstante sí que cambiaría algunas cosas del cristianismo, básicamente tres.

1. No me gusta la idea de estar agradeciendo constantemente todo lo bueno a Dios, como si él se llevase todo el mérito y la gente ninguno,  esto creo que afecta negativamente en la gente porque el fiel que no ve retribuído su esfuerzo o su mérito tiene menos ganas de hacer cosas, de mejorar, de elevarse, de trascender, es como no ser el dueño de tu propia vida, una mentalidad muy esclava pese a que se nos llama "hijos de Dios", un hijo no es un hijo si lo es para siempre y no puede llegar el día en que se haga mayor y sea él el padre, y tome plena responsabilidad y mérito de sus acciones.
2. Se hace poco inciso en la necesidad de buena actuación del fiel y demasiado en la adoración de Dios, haciendo que el fiel vea más importante tener fe que hacer la Obra de Dios. El fiel ve más el buen hacer como una motivación para obtener el premio de la vida eterna, esto no lo veo auténtico y sincero, hacer por recompensa no es hacer realmente, se crea un gran abismo entre lo divino y lo humano, las grandes cosas se dejan a Dios, mientras que para los hombres "con que se sea un poco bueno para ganarse el cielo ya basta". Si la gente fuera consciente de lo mucho que puede hacer, por iniciativa propia, y la recompensa personal que eso da, lo harían, pero como dije en el anterior párrafo, toda satisfacción se la lleva Dios porque de quedársela el hombre, es visto como símbolo de vanidad.
3. También cambiaría el poco mensaje que hay en el cristianismo de perfeccionarse uno mismo, de hacer introspección, ver las faltas y corregirlo. Quiero decir, se hace mucho inciso en el pecado y la búsqueda del perdón, pero esto normalmente hace que la gente se preocupe más de no pecar y de no enfadar a Dios y buscarse su perdón como perritos que han meado en la alfombra que de centrarse en asumir los propios errores y querer mejorar y avanzar, utilizando la culpa como una motivación para progresar y no como un acto de autohumillación para dar lástima a Dios. Esto hace que la gente cuando actue mal se limpie fácilmente rezando o confesándose, en vez de cargarse la responsabilidad a ella misma y buscar el perdón de uno mismo, que es mucho más difícil. Falta de consciencia sobre el bien y el mal y la propia responsabilidad produce eso.