Este relato quedó finalista del certamen y ha sido publicado en la antología conmemorativa Noche de brujas. Si deseas leerlo, podrás encontrarlo en el siguiente enlace: http://www.amazon.es/Noche-brujas-Gustavo-Adolfo-B%C3%A9cquer/dp/1519509448/
Los eventuales beneficios de la antología servirán para mantener vivos proyectos foscos como este. Esperamos que la disfrutéis.
Un grandísimo relato, enhorabuena. Me encanta cómo está contado, el ritmo con el que se conduce la acción, y el tono general, tan logrado, en tercera persona pero desde la óptica de Elicia.
El final también resulta: redondea lo que viene sucediendo, en la misma línea de la acción pero con esa ligera vuelta de tuerca tan difícil, haciéndonos contemplar lo mismo desde otro sitio.
Las pegas: algunos párrafos me han resultado confusos, no sabiendo de primeras quién era el sujeto. He tenido que releer para seguir el hilo. Y hay una cosa que para mí tiene un doble filo y es la naturaleza de esas brujas. Son las típicas, viejas, feas, malvadas... Lo que va en consonancia con la ambientación pero a su vez define en exceso cómo va a ser el pacto que se haga con ellas. Yo hubiera agradecido otra visión de la brujería no tan típica, no tan tradicional.
4, 5 estrellas y mis felicitaciones.
Hola, Melmoth. Has conseguido un relato que me ha encantado: directo y compacto.
La temática propuesta está presente y es tratada con su clásica esencia. Los personajes tienen sus objetivos, todos están bien definidos (es un logro conseguirlo en menos de tres mil palabras y sacar una buena historia adelante).
El principio te presenta lo que parece el eje central de la historia y, paralelamente dispones con maestría la sorpresa del giro de tuerca. Los detalles son geniales, incluso la escena de las brujas en la alquería me ha parecido genial y descrita con los cinco sentidos. Me quedo con esos detalles que parecen no tener relación con la historia, como el padre borracho, el campo sin arar, la pobreza de la familia que se hace cargo de la huérfana, el crucifijo; todo queda bien atadito.
También logras el clímax en esa escena donde Elicia espera viendo el amanecer, describes sus pensamientos, el paisaje y mantienes la tensión del desenlace sin alargarlo demasiado.
Al principio creí que la historia debería seguir al personaje de Pía, y me extrañó, pero luego, al ver el giro de tuerca, lo comprendí todo. Genial el punto de vista del narrador.
Para mí, el único desperdicio, ya que se ve venir lo que hará la bruja con Pía, fue no disfrutar más de cerca el asesinato de la bruja, aunque se entiende que el personaje de Elicia debe estar alejado para no levantar sospechas por no prestarle ayuda. También me dio la sensación de un final abrupto, sin jugar bien esa sensación de peligro que corre Elicia después de ver el asesinato de su amiga. Creo que una idea que puede redondear más el giro de tuerca es que Elicia no haya guardado el crucifijo en la piedra y se lo muestre a la bruja al final como advertencia, creando un conflicto y desplegando esa sensación de final exprés: quedaría claro que la niña sabe bien lo que se hace. De todas formas el desenlace te deja con un buen sabor de boca. Bravo. Buen trabajo.
Por indicarte algunas faltas (poco graves, ya que veo el texto muy bien trabajado), revisaría esta frase:
«Que su cuerpo no descansa, que no podrá llevarla flores al cementerio el día de los difuntos, que quiere verla y abrazarla y pedirla perdón y no sé qué otras cosas»
En los dos verbos señalados el complemento directo es un objeto, no la madre, así que deberías cambiarlas por “llevarle” (Comp. D.: flores) y “pedirle” (Comp. D.: perdón) o eso creo.
Mi voto es para un relato que cumple con creces el tema, bien trabajado y con un estilo claro y directo. La trama es compacta y trata de forma original el pacto clásico de las brujas, con un giro de tuerca sorpresivo y personajes bien presentados:
★★★★☆
Una historia un tanto descabellada (una niña acuerda con una bruja enviar a una amiga a reunirse con su madre en el fondo de un lago a cambio de un puñado de monedas, los ahorros de la ahogada precisamente, que, escondidos, aparecen en el último momento), lo que no tiene por qué ser malo; de hecho, creo que es conocido, a mí siempre me gusta que el personal desbarre un poco.
Las brujas que habitan la fantástica alquería no son muy brujas, más parecen viejas putas, la principal en concreto un poco bruta: para hundir a la niña se vale del grosero, poco brujesco procedimiento de tirarla al agua con una piedra atada al cuello.
Brujería hay poca, o nada, yo no la veo. Si el relato hubiera empezado, o terminado, con la descripción de un campo de cereal que nadie trabaja y sin embargo ha florecido espontáneamente, pues todavía.
La desaforada imaginación del autor nos ofrece buenas imágenes como los peces blancos que se deshacen como pastillas de jabón o una nariz que se han comido las truchas.
Formalmente, veo el principio más cuidado que el resto. Aparte de varias imprecisiones, he visto por lo menos tres veces construcciones del tipo la dijo, la dio (los bueyes la lanzan miradas…)
En suma, creo que como ante el Violinista, volvemos a estar ante un autor muy joven, con muchas ganas y con mucha gracia.
3 estrellas
Muchas gracias por los cumplidos. Me alegro de que os haya gustado el relato.
Sobre vuestras críticas, os doy la razón básicamente en todo. Belagile, es cierto que el final puede ser algo precipitado, en especial si se compara con la primera parte. Bestia Insana comenta algo parecido, dice que el principio está más cuidado que el resto. Salino, tu idea para el final sobre el crucifijo me parece mucho mejor que la mía (lástima que esté prohibido editar el relato para robártela).
L. G. Morgan, es verdad que he usado una idea bastante arquetípica de las brujas, ya que no es donde he puesto el foco del relato (que es algo que, con buen criterio, también ha observado Bestia Insana). Aunque no aparece ningún elemento sobrenatural, pienso que el engaño es –o puede ser- un componente importante de la brujería, o al menos así es como decidí enfocarlo. No sé, decisiones…
Los laísmos (y leísmos) son mi lastre como meseteño. Lo que a mí me suena bien, en otras partes de España canta y mucho, lo cual, por supuesto, no es excusa. Tendría que haber sido más cuidadoso en las revisiones.
Bestia Insana, lo de mi edad no tiene ninguna importancia. Todo el mundo que haya leído a Maturin sabe que soy inmortal ;-).
Bromas aparte, muchas gracias a todos por las valoraciones y por los comentarios. Animan a seguir currándoselo cada día un poco más.
Bromas aparte, muchas gracias a todos por las valoraciones y por los comentarios. Animan a seguir currándoselo cada día un poco más.
De eso se trata: aprender y mejorar :)
Muy buen relato, entretenido, bien escrito (salvo alguna frase que he tenido que leer dos veces) y con una trama trabajada
Enseguida se empatiza con las niñas, y eso no es un trabajo fácil. La verdad es que salvo alguna descripción un poco larga, no hay nada aburrido
La parte de las brujas me ha encantado. Es cierto que parecen más prostitutas que brujas, pero esa imagen es de las que se quedan y seducen al lector. Además, me ha parecido original ver una calle llena de brujas vendiendose a posibles clientes. Y muy bien jugado esa personaje que no dice nada y al cual elijen al final.Aunque imaginé lo que iba a pasar no imaginé el giro final. Y entonces ya me cuadró su silencio
En definitiva, un relato que nos enseña que a veces las peores brujas viven dentro de nosotros
5 estrellas.
Muy buen relato, aparte los fallos ortográficos ya mencionados y que en lugar de "calostros" sería mejor "legañas". La antigua brujería de pueblo en todo su esplendor, me ha encantado la tipología de todas ellas, las viejas decrépitas y enlutadas, las gitanas, las conocedoras del bosque y las locas desnudas como ecos de las antiguas ménades y esa conseguida ambientación de zona rural a finales del XIX, aunque como bien comentan, si en el final se remarcase más el enfrentamiento entre ambos personajes ganaría en potencia.
Cuatro estrellas y media:
****´
Sin duda, tengo muy pocas objeciones con respecto a su estilo. El relato me parece fascinante, tanto por su macroestructura miserable como por sus fragmentos tétricos.
Es cierto también que a pesar que se nombran y describen "brujas" (sí... parecen putas), la brujería como tema solo se entrevé al final, o ni siquiera eso. No hay ningún acto que lo acredite; cero hechizos, cero maleficios, y en el final, la sospechosa promesa de..., cosa que puede hacer cualquier estafador (no quiero pensar que sufro de algún grave problema de comprensión lectora, que alguien me haga saber dónde se puede leer un acto de brujería) Ahora bien, que el engaño es, o puede ser un componente importante de la brujería, es muy discutible. El engaño es un componente más bien accidental, accesorio, y no esencial. Todos engañamos y no por eso todos somos brujas. Obvio que respeto el enfoque, la decisión del autor, pero ya de entrada me resulta hasta inconsistente la idea de brujas cobrando dinero por sus servicios. ¿El dinero le sirve de algo a una entidad que goza de la afortunada habilidad de cambiar las circunstancias de forma sobrenatural? ¿Qué va a comprar con su dinero que no pueda conseguir mediante su poder? (que lo del dinero es simbólico... ok)
Por otro lado, concuerdo firmemente con Sanbes cuando dice que este relato nos enseña que a veces las peores brujas viven dentro de nosotros.
★★★☆☆
Vaya por delante que no le encuentro ninguna pega al relato, laísmos aparte (si pueden considerarse pegas atendiendo al origen del autor). Incluso la brujería que algunos no encuentran a mí me parece parte esencial del relato, su motor, ni más ni menos. Que la segunda parte luzca ligeramente menos narrativamente hablando se debe, en mi opinión, a que su inicio es totalmente cautivador, no solo introduciéndonos en la historia sino ofreciéndonos detalles inmersivos que dan vida a las pequeñas. En su cierre, sin embargo, hay repuntes escalofriantes: cuando Elicia relaja sus músculos al terminar el ahogamiento y al hablarle a la difunta Pía en pensamientos.
El giro final, la verdadera intención de Elicia, ha funcionado conmigo. En definitiva creo que es un excelente trabajo que he disfrutado muchísimo.
Enhorabuena.
5 estrellas
Un texto con calidad, afeado por unos cuantos laísmos. También me chirría un poco que al inicio del relato no queda del todo claro de quién es la madre muerta, y hay cierta confusión entre niñas, pero se disipa pronto. Si hiciera un resumen de la historia y lo comparara con el resto de las presentadas a este certamen creo que este relato no destacaría especialmente, pero el hecho de estar narrado con tan buen pulso y tener tantos buenos detalles produce que el sabor de boca final sea bastante positivo.
Gracias de nuevo por todos los comentarios. Angelito, veo que te ha pasado lo mismo que a Bestia Insana con respecto a la temática del relato. Sigo pensando que en mi relato sí hay brujería (hay brujas, la promesa de magia, etc.), pero es verdad que no se ve practicar ningún hechizo de forma directa. En cualquier caso, más allá de esta cuestión, me quedo con la idea de que el estilo te haya parecido interesante, y eso ya me alegra el día.
Hedrigall, nada que añadir, salvo darte las gracias. Tus comentarios son muy bien recibidos, y me encanta que el relato te haya gustado.
Y gracias a ti también, Invierno, por llamar la atención sobre esas confusiones al principio del relato. Me pasa porque me concentro en intentar captar la atención del lector enseguida, y a veces eso lo acaba por desubicar un poco. Revisándolo ahora podría haber metido una o dos frases en los primeros párrafos que lo habrían dejado todo más claro.
En definitiva, nunca dejamos de aprender 
Excelente. De lo mejor que llevo leído en el concurso (yo soy de pueblo y me ha encantado el detalle de leer lo de la leche, las vacas y las serpientes. También la descripción de las brujas, y la alquería, y otras muchas cosas, en especial, la forma de narrar). Esas pocas faltas (malditos la,le,loísmos del demonio...), que pueden corregirse facilmente, lo dejarían casi perfecto para la antología. Porque en mi opinión, es otra plaza segura. El final podría redondearse más, tal vez, pero yo no sabría cómo. Me gusta mucho así como está, pero podría incluso gustarme más, lo admito. Una última cosa,y es que yo he apreciado otras dos cosillas de nada:
Debería de saber bien de lo que se hablaba: sobra un de.
...alquería están--hundiéndose en el limo: un espacio que probablemente persista en word.
Enhorabuena. Mi nota: 4.5
Redondo. Qué decir. La construcción de la historia es perfecta y el pase de manos está ejecutado con maestría. El poblado de brujas es particularmente sugerente y los personajes de las niñas están muy bien construidos. Todos los elementos ahí y todos bien utilizados para montar el relato, y un ritmo impecable. Bravo.
Salvo algún dedazo en forma de errata que se ha colado, el resto lo veo genial. No es lo que se cuenta, que es horrible, sino la forma, que te hace leer sin detenerte para disfrutar de cómo va recreando todo, las niñas, el pueblo, la alquería... la forma en cómo la niña mira el asesinato de su amiga tiene la sencillez de los niños y a la vez es terrible.
Buenísima la escena de las brujas alrededor de las niñas, buscando el oro.
5 estrellas
En definitiva, nunca dejamos de aprender
Gran verdad. Y en ese sentido, experiencias como las del Polidori vienen como anillo al dedo. Yo sé bastante poquito, pero prácticamente todo se lo debo a concursos con mecánicas parecidas. No solo en lo que respecta a escribir; también es importante la otra parte, la del análisis de textos y comentarios posteriores razonados.
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Te felicito por el relato, Melmoth. Me ha gustado mucho. Tiene esa ambientación propia de los cuentos de brujas, sin quedarse atrapado en una mera narración. Se puede apreciar la motivación de ambos personajes para conseguir sus objetivos y la angustia de la muchacha que ha perdido a su madre. Un relato de menos de 3.000 palabras no da para profundizar más en todos esos sentimientos y avanzar a su vez en la acción. La aparición de las brujas como personajes secundarios me parece interesante. Lo único que no me convence es el final. Aparece algo precipitado. Es cierto que para lograr una sorpresa por parte del lector era mejor no introducir más pistas que pudieran desvelarlo antes de tiempo. Pero a pesar de ello he visto venir la verdadera intención de la bruja, y la verdad es que tampoco me ha disgustado. Quiero decir, que la falta de sorpresa en el desenlace, para mí, no ha sido un lastre. Te quedaban aún 200 palabras, más o menos, que podías haber utilizado para redondear ese final. Habría bastado con mencionar con mayor que el padre de Elicia no lograba sacar adelante la cosecha para redondear el relato. En cualquier caso, es un buena historia. Saludos y bienvenido al foro.
★★★★☆
Giny Valrís
LoscuentosdeVaho