Borrado por autora - Bis bald!

...es hora de que conozcáis vuestra ubicación. Anna, cariño, abre la compuerta, por favor. Acompaña a nuestros invitados al exterior. Es de noche, pero la luz de la luna os permitirá reconocer perfectamente el entorno. 

Bienvenidos al golfo de Gdansk. Estáis a bordo de un buque de carga.

Desde el momento en que la embarcación es solo un buque de carga y nada más, la certeza es que tal carguero es de bandera desconocida. Yo no hablé en base a ninguna interpretación, sino a una certeza que está en el propio texto. Las interpretaciones a partir de allí son varias; puede ser tanto ruso como de la República Democrática Alemana o uruguayo.

De todas formas, lo que hice fue celebrar que un submarino ruso no le torpedeara teniendo en cuenta que además hay cuatro tipos visibles en cubierta que están siendo despedazados por un hombre lobo, imagino incluso que se habrá tomado su tiempo. Si están a una distancia adecuada y con una buena luz de la luna para reconocer, en efecto, que están en el golfo de Gdansk, entonces también pueden ser vistos desde otro barco o desde algún punto de la costa (en los setenta los prismáticos ya tenían un alcance bestial) además porque sobre la cubierta habrá luces prendidas. También me pregunté ¿y en el carguero hay más gente? ¿A nadie le importa que haya un hombre lobo comiéndose elementos de la tercera edad sobre la cubierta?

Por rizar el rizo nomás.

Interesante relato, bien escrito y bien contextualizado en el ambiente de los terribles bombardeos sobre Koenigsberg. Para mi gusto, eso es lo mejor del relato, la primera parte, esto es; hasta la aparición del piloto. La fase licantrópica me ha parecido más complicada, más difícilmente hilada, con la, salvo que quisiera suicidarse, extraña actuación del piloto y la transformación que me ha parecido como si fueras la primera. No obstante, la escena del ataque está reflejada con fuerza. Más impostada me ha resultado la presentación de los "reos" de lesa humanidad. que resulta directamente enfocada al lector -por innecesaria para el wolfskind o su hermana-  y nada sustancial en la historia.

Dicho lo anterior, parece como si no hubiera gustado, pero no, si que lo ha hecho. Es un muy buen, entretenido y bien ambientado relato que, en mi consideración, merece cuatro estrellas. 

Anotado.

Un relato muy bien construido al que, quizás, le hubiera venido bien un poco más de espacio. Da la impresión de que se quedan cosas en el tintero. La prosa está muy conseguida y tiene algunas imágenes memorables. Alguna pequeña errata y reiteración, pero nada que empañe el conjunto. La ambientación le sienta muy bien a la historia e incluso se acepta el final / confesión por el buen pulso narrativo. No obstante, ha hecho que me plantee una cosa: el tono.

Durante toda la narración he tenido la sensación de que el narrador se dirigía a un público más bien neutro. Sin embargo, al final parece que está hablando con los personajes a los que ha juzgado y condenado. Ahí hay un punto que no termina de casarme y que compromete (algo, no mucho) mi suspensión de incredulidad. Me da la sensación de que un tono más duro, más cortante, reflejaría con mayor acierto la situación que vamos a descubrir al final.

En cualquier caso, como digo, no impide que el relato funcione, y que lo haga muy bien.

Lo malo de tardar tanto en comentar es que poco queda en el tintero, pero no quería dejar pasar la oportunidad de al menos poner mi puntuación...

Muy buen relato, claro que sí. Una ambientación muy lograda, me habría gustado ver más de ese precioso escenario que se pinta al comienzo antes de que la guerra lo rompa en pedazos (pero claro, entonces sería otro relato) y conocer sus gentes y costumbres.

Me ha gustado mucho la explicación del cornezuelo porque se deja clara la causa de la licantropía sin tener que entrar en detalles que romperían el ritmo del relato y da qué pensar al lector (¿es el cornezuelo el origen de la maldición o sólo el catalizador que termina de liberarla?; me gusta pensar que el crío provenía de una familia que llevaba la licantropía en la sangre y que por eso se llama Wolfgang).

La descripción del bombardeo, cruda pero sin regodearse, muy adecuada. Me recuerda a las películas bélicas clásicas, que logran impregnar los horrores de la guerra sin tener que recurrir a entrañas ni grandes efectos especiales.

Los niños acercándose al avión caído... Se masca tanto la tragedia que reconozco que me agobió un poco, quería gritarles que se fueran, que se alejaran de él. Muy efectivo, claro que sí.

Con la conversión, el relato se tuerce y creo que es porque resulta algo precipitada, como si la escritora de pronto recordara la temática del concurso y se diera cuenta de que -ops- sólo quedan 1000 palabras para el desenlace y el epílogo. Además, adolece de síndrome de la sorpresa temática y personalmente, tras tantos relatos de hombres-lobo, tuve cierta sensación de redundancia.

El epílogo tampoco me convenció, con la hermana de nuevo viva y un montón de personajes nuevos que van a ser ajusticiados. Lo entendí mejor leyendo los comentarios de otros participantes: se quiere dar un mensaje porque en el fondo el relato se les estaba narrando a esos criminales de guerra. Vale, es lógico y efectivo, pero a mí la verdad es que se me escapó y la sensación final fue extraña.

No me gusta terminar sacando pegas porque da la sensación de que no ha gustado el relato (a mí me pasa cuando me comentan el mío :D) y desde luego no es así. Creo que es brillante, no deja dudas de que eres una gran escritora y no pasa ni mucho menos desapercibido.

Puntuación: 4 estrellas.

PD: Flipo con los comentarios, qué puestos estáis en todos los temas... Me hacéis sentir algo inculto :P

Creo que ese miedo lo tenemos más de uno.