Solo a veces me gustaría no tener la razón, que alguien apareciera de la nada y tumbara mi lógica como un castillo de cartas. Me gustaria que pusieran en jaque mi razonamiento, porque así no tendría sentido lo que hago y podría entregarme a hacer lo que tengo ganas, sin necesidad de racionalizar lo que me pasa.
Solo a veces me gustaria no tener la razón; pero...
Por mas que me bañe en humildad, se evapora al rato...
Bien venido, en hora buena. Ya te estabas tardando.
"El mundo se ha desquiciado, ¡vaya faena, haber nacido yo para remediarlo!"