Vampiros y demás criaturas de la noche

Reconozco que no lo he leído, pero creo que la saga de Crepúsculo es bastante conservadora. No son la clase de vampiros que me gustan. Prefiero otros más oscuros, como los de la saga de Sookie Starkhouse.

Desde luego, la fascinación del vampiro viene de esos dos elementos: la vida eterna, que ya era la tentación incluso cuando el vampiro era unívocamente malo (como en "Drácula", de Bram Stoker), y el poder, sobre todo en el terreno que normalmente nos está vedado a los hombres: la noche.

Son elementos que a los jóvenes les tienen que atraer, es lógico, en mayor o menor nivel. Eso sí, los vampiros de Crepúsculo no son los primeros, ya que hubo una primera ola con "Entrevista del vampiro" (y tomos subsiguientes) de Anne Rice, en los que ya el vampiro era narrador y resultaba humanizado.

La diferencia entre los vampiros de Rice y los de Smith es su moralidad. La primera es una escritora macabra, quizás por motivos personales (su hija murió, al parecer, en un incendio), y se regodea en lo oscuro. Sus personajes no son maniqueos, sino que siguen sus propios criterios, y eso fue lo interesante de la serie: tenían motivaciones de vampiros, pero no eran simples monstruos. El gancho, por supuesto, era el erotismo.

Ahora bien, los de Smith, copiados luego por Meyers, son vampiros morales. Los hay buenos y los hay malos. Son más pop, más estéticos y más frivolos. Al mismo tiempo, no rompen con lo establecido más que testimonialmente (esto se ve muy claro en "Traicionada", de las Cast, escrito entre madre e hija).

No creo que esto resulte, per se, más atractivo para los jóvenes, pero quizás sí menos inquietante para los padres También ha pillado un momento en el que la difusión mediática de la literatura juvenil ha alcanzado cotas impresionantes.

 Bueno, en opinión de Stephen King, Stephenie Meyer escribe mal, aunque también es cierto que no me fío mucho de su criterio desde que publicó su lista de sus 10 películas favoritas de 2009.

Espero que no fueran tan malas como la película que rodó él mismo.

Los libros que se publican hoy en dia sobre el tema vampírico, salvo excepciones, no son de mi agrado. De las publicaciones vampíricas de moda como Crepusculo no se puede leer nada entre líneas. Muestra lo que quiere mostrar, simplemente, sin buscar nada entre líneas, por que no lo hay. No deja de ser una historia de amor pastelera para quinceañeras con "vampiros" de por medio.