Lorem Ipsum

Hola de nuevo compañero. Me gusta tu estilo. Vaya si me gusta...eres de los míos..vas al grano sin demasiadas florituras. Aunque la historia es interesante, no me acaba de convencer. Falta emoción, algo de intriga, de sorpresa. Ojo con la ortografia y las erratas, en este hay bastantes, como " a el" en lugar de "al", palabras ausentes o repetidas en sitios que descolocan y dificultan la lectura. Le falta un repasito, o dos...

Mi puntuación es un 2,6

Aún tengo que comentar adecuadamente el relato, ya adelanto que la aproximación al tema me ha parecido original, pero desde luego que tenías otras opciones. El desarrollo de la narración lo controlas tú. La momia puede aparecer al final del argumento, pero tú puedes montar una trama en la que aparezca al inicio o en el medio de la historia, y seguirá siendo la historia que querías contar, solo que en un orden distinto. Quizá hubiera ayudado a un desenlace más imprevisto.

Un saludo.

Un buen relato, ameno e interesante, escrito con buena técnica y un tono ligero que va metiéndote en la historia.

Los personajes están bien desarrollados, aunque Raoul me resulta anacrónico, más propio de los años 70 que de la actualidad. El prrofesor tal vez necesitaba ser definido algo más, pero cumple con su papel.

El final es un poco apresurado, carente del vuelo que el relato hacía ver, pero aun así eficaz y coherente.

Mi nota es 3,75.

Comento dos relatos seguidos del mismo autor. Pura coincidencia.

Como siempre, mis comentarios estaban escritos antes de leer los de otros foreros, aunque luego los adapto antes de publicarlos. Aclaro esto porque estoy de acuerdo con algunas opiniones y también con las respuestas del autor, cosa que detallo un poco más adelante.

Gran relato. Un gustazo poder leer tres relatos tan buenos y tan distintos por parte del escritor.

Aquí toma un relato clásico, escrito no por el protagonista sino por el amigo del protagonista, una forma de abordar la narración muy socorrida que bien llevada suele dar buen resultado (como es el caso). La trama tarda en arrancar, se toma su tiempo, pero lo veo justificado, ya que el lector debe conocer las extravagancias y anhelos del protagonista para meterse mejor en la historia. No me gusta que empiece a la mitad, continúe por el principio y termine por… Bueno, ya se entiende qué quiero decir. Este recurso, también socorrido, tiene que estar justificado (si vas a marear al lector, que sea por un motivo) y aquí no lo veo. Pero es una pega menor.

Me gusta mucho el hilo narrativo. Se cuenta de tal modo que parece que me lo estuviera contando alguien conocido (es la segunda vez esta noche que hago este comentario) y eso hace que me resulte fácil creérmelo todo. Buen uso de la primera persona. Me llaman la atención esos detalles mundanos (como la descripción de los túneles de metro), tan prescindibles pero a la vez estimulantes, que ayudan al lector a sumergirse en la trama. Bravo por esto.

Se ha mencionado que el reputado parapsicólogo (yo también suelo escribirlo con la segunda pe) (y ojo, cuando se hace referencia por escrito a una letra, diría que se recomienda poner el nombre completo, no la letra entrecomillada BUSCAR) resulta un personaje arquetípico; puede ser, a mí me lo pareció, sobre todo por su acento supuestamente simulado (me recuerda al médico brujo de mi novela corta inconclusa y casi autobiográfica Vudú con mi jefa; autobombo), pero soy de la opinión de que ciertos arquetipos y clichés, bien empleados, son admisibles. Además, en este caso y como el mismo narrador opina, no era el clásico estafador sino más bien un aficionado, idea que refuerza el propio título del relato.

Y vamos con lo peliagudo: el final. ¿Es previsible? Me temo que sí, desde el minuto uno. ¿Es culpa de que el certamen tenga la temática Momias? Al noventa por ciento, sí. ¿Si la temática fuera otra, digamos horror libre, me habría gustado más? Casi seguro, tendría que vivirlo…; se dan muchas pistas de por dónde van a ir los tiros. ¿Perjudica esto al autor? Depende de qué quiera el autor. Si el autor tiene este relato en mente y quiere escribirlo, adelante, para eso está el Polidori. Si el autor quiere ser seleccionado, es cierto que parte de una posición poco ventajosa. A mí particularmente, el relato me ha gustado mucho y no me ha importado que termine según lo esperado, porque me interesaba bastante cómo se iba describiendo el camino hacia ese desenlace previsible. El final resulta fatal para el protagonista, pero no para el lector (no para mí, al menos).

Sí creo que el narrador tiene dotes más que suficientes para haber podido horrorizarme más con el final, para regodearse con el horror. Es una baza que podría haber jugado para mitigar ese final tan esperado. Como me decía con frecuencia mi padre ¿quieres chocolate?, ¡pues toma dos tazas! Es decir, ¿te esperabas que al final lo iban a momificar en vida?, ¡pues así es, pero vas a flipar con los detalles! No sé si me explico.

Y ya termino, lo prometo. Retomo el hilo: empecé diciendo que había comentado y puntuado antes de leer otros comentarios y así fue. A mí, repito, me ha gustado mucho y disfrute con la lectura, si bien es cierto que tenía pensado resaltar que la temática perjudica al relato; se lleva tres estrellas y media.

Ya tienes los tres puntuados. Grandes relatos, Stendek. Mil gracias.

Estoy de acuerdo con el autor en que la temática pone muy difícil sorprender al autor. De todos los relatos que he leído, sólo he encontrado un final sorpresivo y no por ello pienso que el nivel esté bajo. Evidentemente concederé un plus a los poquitos relatos que consigan sorprenderme. 

Que el final sea previsible no me parece problema pero sí que le falta fuerza a ese último párrafo. Por lo demás el relato es entretenido y está bien escrito. Su lectura me ha sido grata. Lo que más le perjudica más allá del último párrafo es que el relato tiene marcados paralelismos con La tentación todavía vive arriba y éste me ha parecido mejor. Pero ya digo que me ha sido una lectura grata.

Mi puntuación es 3'5 puntos

Cuento tradicional con buen ritmo. Su escritura me recuerda a esas largas confesiones que se escribían a finales del siglo XIX en la literatura de terror, pero muchas de las palabras o terminos empleados podrían haberse simplificado. Ademas de que por momentos choca que alguien hable así al lado de un celular o una computadora. La segunda historia no termina de conectar con la primera; pero me entretuvo. Creo que la historia del impostor podría ser un cuento por si solo, y hasta más interesante. Un digno homenaje a viejas historias, pero no mas que eso. Mi voto es de 2,8