...esta es una receta muy culichi, muy sinaloense y muy teporocha. Es una receta para esos angustiantes momentos que te provoca el mayor enemigo de la diversión, el placer y toda cosa apreciada que tenga la humanidad: la resaca. ¿Quieres cortar la resaca de un tirón, sin necesidad de meterle químicos que provocan daño colateral, como la taurina o la bramina? Pues aquí les traigo una buena nueva:
- 150 gr. de ostión de mangle (4 piezas), o en su defecto, la variedad de esta joya que tengas al alcance.
- 700 ml. de jugo de tomate (o jugo de verduras, dependiendo de la región, cambia la denominación de este jugo).
- 300 ml. de cerveza clara (en España creo que les llegan la Corona y la Sol, cualquiera de éstas puede servir).
- 1 rodaja de limón.
- Sal.
- Pimienta.
- 1 varita de apio deshojada.
...en un vaso grande de cristál y recién salido del congelados, embarrar con la rodaja de limón (huntar con jugo). Esparcir la sal en un platito plano, y poner la boca del vaso en la sal, para que se adhiera al borde. Luego vacía los ostiones con su jugo, el jugo de tomate y la cerveza, en ese orden, en el vaso. Añade un poco de limón al contenido y una poca de pimienta. Con la varita de apio, mézclalo.
¡Listo!
...el primer trago te refrescará. Después de unos tres o cuatro, el dolor de cabeza se te pasará. Cuando hayas comido uno o dos ostiones, comenzarás a sentirte más hidratado y nutrido (cosas que provoca el alcohol en la sangre, el hígado y el cerebro) y se te pasará la ansiedad por la pequeña cantidad de alcohol que has añadido. El ostión proporciona mucha proteína. El jugo de tomate, vitaminas. La vara de apio es para que se te vaya el espantoso hedor que te queda en el hocico después de una borrachera. La sal y la pimienta, son para facilitar la rehidratación. El limón... pues es que sabe de puta madre con limón.
...en fin, que aproveche, y ¡SALUD!
Aquí las llamamos ostras. La apunto también. Pero un poco sibarita ir de ostras para la resaca.