La epopeya de las cruzadas

Reseña de la obra de René Grousset publicada por Perrin en la colección Tempus

Como su propio título deja entrever, La epopeya de las cruzadas (L'épopée des croisades, en el original francés) es una descripción de estos episodios históricos desde una perspectiva épica y en buena parte subjetiva. Esto no quiere decir que el trabajo de René Grousset sea desdeñable o impreciso, sino, simplemente, que no duda a la hora de incluir apreciaciones personales en el texto. Hay que reconocer, al mismo tiempo, que la tentación es grande: no se trata solo de las dimensiones del conflicto y de lo romanesco de algunos personajes implicados, sino de todo el imaginario que durante siglos hemos construido en torno a las cruzadas.

El autor fue miembro de la Academia Francesa y todavía a día de hoy se le considera uno de los más grandes historiadores del Próximo y Lejano Oriente. En particular, es una referencia en cuanto a la historia de las cruzadas y el reino franco de Jerusalén. Es por eso que el contenido de esta obra es fiable, pertinente y esclarecedor de algunas claves de este particular fenómeno sociopolítico, impregnado de aspectos religiosos pero, sobre todo, explicable a través de factores económicos y de poder.

Además, la escritura de René Grousset es amena, clara e ilustrativa. Es capaz de llegar a un lector no especializado y fascinarlo con los hechos que presenta, que adquieren una dimensión humana. En cierta medida, recuerda a un profesor de Historia apasionado con su materia. Y, en ese sentido, precisamente, quizás para los lectores contemporáneos pueden surgir algunas pegas.

No es que aborde la cuestión de las cruzadas desde un punto de vista maniqueo, pero sí se ve una querencia por determinados personajes históricos (y por dar relevancia a estos dentro del discurrir de los acontecimientos), filias y fobias, y, sobre todo, un anhelo de que las cosas hubieran sucedido de otra manera. Así, como fuente primaria de información es cuestionable en algunos aspectos, pero, por el contrario, funciona muy bien como forma de divulgación.

Después de todo, si nuestro deseo es conocer un poco mejor la época, es una aproximación que resulta satisfactoria, con sus anécdotas, sus comentarios y sus opiniones. Si este carácter casi romanesco en algunos aspectos puede ser cuestionable a día de hoy dentro de la disciplina histórica, de su carácter de ciencia, puede resultar un valor añadido cuando se aborda la lectura de una obra semejante como un divertimento.

Así, personalmente, encuentro que La epopeya de las cruzadas es un título muy ameno y entretenido, organizado de un modo sistemático y cronológico muy intuitivo, que permite acercarse a la época con facilidad y agrado, de la mano de un divulgador, René Grousset, apasionado y hábil con las palabras, con una visión muy clara de lo que fueron y lo que pudieron ser las cruzadas.