Hellblazer: Pandemonium
Reseña del cómic de Jamie Delano y Jock publicado por Planeta DeAgostini
Dentro de la línea Vertigo, Hellblazer destaca como un cómic estrella, y basta con echar un ojo a volúmenes como este Pandemonium para entender por qué. En esta novela gráfica —pues como tal hay que entenderla— engarzada dentro de la larga trayectoria de su protagonista, John Constantine, tenemos una buena ración de esa renovada fantasía oscura con la que estamos disfrutando tanto en los últimos tiempos.
Hellblazer: Pandemonium nos plantea una trama bastante lineal en la que el experto en asuntos sobrenaturales se ve arrastrado al conflicto bélico de Irak. Obviamente, Constantine no irá como miembro regular del ejército —ni tampoco de buen grado— y su presencia en ese territorio convulso y ocupado por tropas extranjeras nos permitirá tener una visión distinta de la guerra y de quienes se ven implicados en ella.
En un primer nivel, el cómic nos plantea una trama que mezcla la mitología acadia —o sumeria, o babilonia, si se prefiere— con elementos contemporáneos. Sin embargo, no se trata de una simple actualización de mitos o una injerencia pop de los mismos en el presente, al estilo Marvel, sino de una revisitación que permite centrarse en su esencia, algo que es inmutable y atemporal.
Así, lo que podría ser una aventura peregrina compuesta de elementos vistosos —como señoras con cabeza de león y genios que se escapan de sus botellas— se convierte en un relato antibelicista y en una reflexión sobre la naturaleza del hombre y sus ambiciones. El poso sería casi meramente filosófico si no fuera por el prisma con el que vemos el conflicto: los ojos del propio Constantine. Este, que se nos presenta bien entrado en años y particularmente de vuelta de todo, tinta todo de una pátina irónica y socarrona que, lejos de banalizar lo que ocurre ante nuestros ojos, lo vuelve más humano y, por ende, más estremecedor.
Sí, Hellblazer: Pandemonium es humor negro —materia en la que el protagonista se declara experto—, y también crítica social y una magnífica historia de fantasía en su vertiente más oscura. Es un cómic sólido que parece pulp por el lenguaje narrativo que utiliza y literatura ambiciosa por la elección de los temas y el modo fresco en el que los trata.
El guión de Jamie Delano, implacable en su ritmo y en la acidez de los diálogos, en el veneno zascandil de las escenas que retrata, viene plasmado por unos lápices no menos vivos, precisos y rompedores de Jock. En definitiva, una muy buena elección para los amantes de la fantasía oscura que he disfrutado en la edición de Planeta DeAgostini con unas resultonas tapas duras y a buen precio.
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