Cambio de curso
Siempre estaba allí, casi escondido, siguiéndolas con la mirada.
Un día salieron del colegio y ya no vieron al hombre que les sonreía con las manos metidas en los bolsillos.
Las niñas se habían hecho mayores.
Carlos las empujó y corrieron llorando a decírselo a sus madres.
Sorpresas cruzadas
Al salir de clase le hizo un guiño al profesor, él evitó mirarla. De hoy no pasaba sin decirle que se había acabado, ella era una cría y él un respetable padre de familia. También ella tenía una sorpresa para él, la rana había dicho que sí.
Yo soy el rey del jazz a go go, el más mono rey del swing