La troupe 2

Imagen de Anne Bonny

Reseña de este cómic de Aleix Gordo Hostau al que Panini ha dado cabida dentro de su línea de cómics varios

El cómic es uno de los medios artísticos de expresión más jóvenes (aunque ya supere los cien años) y es natural, y, sobre todo, muy saludable, que mantenga su frescura inicial y no deje de beber de la cultura contemporánea. La troupe es una obra que pone de manifiesto que esto no es solo posible, sino además una buena elección, porque este cómic realizado por Aleix Gordo con diversos colaboradores (a destacar Sendu Canals, responsable del guión y el storyboard, y Chimo, al color) se sumerge totalmente en una realidad de nuestros días -la cultura hip hop y, muy particularmente, el arte urbano- aprovechando el viaje para introducir unas pinceladas propias dentro del mundo de la historieta.

 

Es importante precisar que cuando digo que se sumerge en esta realidad no es únicamente porque trate el tema o porque tome por protagonistas a una serie de personajes con dichas filosofías de vida o afines a este modo de expresión, sino, sobre todo, porque consigue transmitir su espíritu en un medio que, a priori, funciona con otros mecanismos.

 

Efectivamente, en La troupe se ha conseguido un estilo gráfico, con trazos desenfadados pero precisos y colores vivos capaces de salir de la página, que refleja muy acertadamente el propio de los graffitis, así como imprimir un ritmo a la acción (a través de historias cortas, como mensajes en un muro) que nos permiten hacernos una idea del mosaico que hay detrás sin convertirse en algo expositivo; la sensación resultante es más cercana a compartir anécdotas entre colegas que a un reportaje, por decirlo de alguna manera. De este modo, el autor ha aunado con mucho acierto los recursos narrativos del cómic y la expresividad del arte urbano para hilar una historieta que se hace muy amena, original y entretenida.

 

Para conseguir el efecto, la parte edición era esencial en este cómic, y hay que decir que desde Panini han hecho un magnífico trabajo, tanto con los colores, las texturas como con el propio tamaño de la página, amplio pero sin resultar abrumador. A destacar las colaboraciones por parte de otros artistas que encontramos a lo largo del número, y que incluyen fotografías, lo que acerca todavía más la obra a la realidad que refleja.

 

Un tema que seguro que rondará a muchos lectores es con qué enfoque se aborda el tema del arte urbano. Es conveniente aclarar que, si bien el activismo a favor es claro, no estamos ante un cómic panfletario, sino uno que, sin más, refleja una realidad que existe sin complejos ni cortapisas. Desde mi punto de vista, tiene más de retrato social que de argumentario a favor de los graffiteros, y eso, francamente, se agradece, pues, cuando se lee un cómic, uno tiene ganas de historia, más que de discusiones. Además, creo que el tema habla por sí sólo, sin necesidad de muchas explicaciones.

 

En esta línea, es también interesante ver que el autor conoce bien el mundillo, y que es capaz de reflejar en las páginas del cómic tanto el escenario (saltamos de Barcelona a Madrid en este número) como su evolución (muy interesante el capítulo sobre el despertar graffitero del protagonista) sin caer en la tentación de ponerse a dar lecciones. De nuevo, todos los elementos se integran en la historia, poniéndose al servicio de la narración.

 

En conclusión, un cómic entretenido y original que entra como un soplo de aire fresco dentro de líneas más convencionales, y que despunta tanto por el resultado en sí, como por la buena conjunción entre arte urbano e historieta.

 

Sinopsis (Cortesía de Panini)

 

Persecuciones callejeras, un viaje al pasado, nuevos protas y una visita a Madrid con final sorpresa. Más de veintidós colaboradores de la escena del graffiti Barcelonés y Madrileño con nombres como Suso33, Gnyo, Pez, Xupet Negre, Nados/Seyd,... y de otros sectores como Álex Fakso, Charuca 0 Cálico Electrónico entre mucho otros, forman el elenco de éste próximo número.

 

Más información sobre el cómic, y sobre su responsable, Aleix Gordo Hostau, en http://www.aleixgoho.com/

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