Best of Marvel: El asombroso Spiderman 2

Reseña del segundo volumen de Straczynski recopilado por Panini Cómics

Después de la buena experiencia con el anterior volumen de Best of Marvel: El asombroso Spiderman, tenía ganas de repetir, de prolongar el disfrute, y la opción más evidente era seguir con el segundo volumen de la colección, en el que se repite equipo creativo con J. Michael Straczynski (guión) y John Romita Jr. (dibujo). Sin grandes sorpresas ni revelaciones, ha funcionado a la perfección.

Este segundo tomo sigue la línea del anterior pero poniendo el acento en los asuntos personales. De hecho, la mayor parte del interés está en la buena caracterización de los secundarios, sobre todo de la tía May. Mary Jane tiene su aquel, pero el peso de la historia, que no de la trama, lo lleva la ancianita, y la verdad es que lo bordan sin muchos aspavientos. Hay algo fascinante en el espacio tangencial de los superhéroes, ese ocupado por los tipos corrientes que se ven abocados a compartir sus vidas. Y en este caso se añaden algunas notas que lo hacen aún más disfrutable gracias al carácter entrañable y decidido de la tía May.

Las aventuras propiamente dichas que sirven de telón de fondo del drama tragicómico de primer plano funcionan bien. La primera es original en cuanto al planteamiento algo espectral del antagonista y su gran interés reside en el apartado social, casi de novela negra, con el que se nos presenta. Quizás por ello el final deja algo frío, con su pase de manos de prestidigitador (mago incluido). Se perdona porque encaja bien con la trama principal (los problemas personales de Peter) y porque, bueno, se lee muy bien.

La segunda nos trae a un viejo conocido, Octopus, y sin soltar el acelerador de una historia de acción al 100%, con mucha destrucción masiva y tortas, consigue tocar la fibra sensible con el leit motiv de la madurez personal y la evolución que es el eje central de esta etapa. Las notas de humor en este arco argumental son sobresalientes, lo que hace un contrapeso perfecto a la carga emocional algo densa que orbita en torno a los personajes.

El resultado, de nuevo, es un cómic muy recomendable, con un Spiderman muy bien perfilado que, además, avanza en su línea vital, con un reparto de secundarios muy bien utilizados y con unas raciones de acción, humor y tensión más que abundantes. Un segundo volumen a la altura del segundo y que deja con ganas de más.