UNA BUENA MANO
Mantener la compostura con el que se cobró la apuesta era suficiente para hacerle ver que, tras cobrársela con el dedo meñique de mi mano izquierda, estaba dispuesto a darlo todo en la Gran Partida y poner en juego, si hacía falta, la mano de mi hija.
Timba clandestina
Cuando mamá se acercaba por el pasillo, plantábamos tréboles en las macetas, camuflábamos diamantes en las baldosas, colgábamos picas en cualquier rama, y guardábamos corazones en nuestras bocas.
Nos encontraba, libros abiertos al azar, sonrisa forzada.
Lo difícil era después, convencer a los naipes de que podían regresar.
Ambos micros se acercan al tema de manera correcta y desde el mismo prisma. Si bien Bombardino lo hace exprimiendo el doble sentido del título que elige para su micro y Letripedia, añadiendo cierta dosis de fantasía.
Bombardino nos “regala” una larguísima frase con un par de incisos, que tal vez dificulte la compresión final del texto. Me parece que una coma entre «apuesta» y «era» nos ayudara a tomar aire en medio de la lectura. Por lo demás refleja bastante bien el espíritu del jugador, dispuesto a cualquier cosa por conseguir una buena mano, sin pararse a sopesar las consecuencias que pueda llegar a tener. La frase « tras cobrársela con el dedo meñique de mi mano izquierda», me genera ciertas dudas, aunque quiero entender que lo que ha perdido apostando nuestro buen tahúr, ha sido su preciado dedo, al que tal vez acompañara una descomunal uña, y que esto le avalaba para afrontar mayores envites, incluso la mano de su hija, suponemos que acompañada con una suculenta dote. El juego de palabras entre una mano de cartas y una mano humana, resulta algo manido y aunque aquí no creo que, además, enriquezca la historia, se deduce de que la primera apuesta perdida, sea la del dedo meñique de su protagonista. El título, ya digo, algo manido con ese juego de manos.
Timba clandestina nos narra esta historia de niños desde el prisma de la fantasía. Me resulta atractiva esa “personificación” de los palos de los naipes y cómo se ha buscado para cada uno de ellos un destino adecuado a su esencia.
Yo habría suprimido la coma entre «pasillo» y «plantábamos», me parece que sin ella la lectura es más fluida.
La siguiente frase me resulta algo atropellada. Da la impresión, aunque es posible que haya sido la intención del autor por el apremio de los protagonistas ante la llegada de su madre, de entrecortarse para no exceder en el número de palabras permitidas.
El final resulta conmovedor, los niños se han esmerado tanto en buscar un buen acomodo a cada carta que luego resulta casi imposible que abandonen su escondite (esto, que me encanta, parece chocar con la precipitación con la que las esconden por el miedo a ser sorprendidos). El título, sencillamente, no me gusta, puede encajar bien en el contenido del relato, pero me parece que el autor podría haberse estrujado un poco más y ofrecernos algo que sacara esa ternura que encierra el cuento.
Un duelo que, sin enamorarme, me ha gustado. Voy a dar mi voto a Timba clandestina de Letripedia, porque en líneas generales me parece estar mejor resuelto.
Una buena mano
SÍES
-El título del relato, por su doble sentido.
-Temática bien encajada.
- Bastante bien resuelto ese único párrafo con puntuación casi perfecta (yo pondría una coma después de apuesta).
NOES
-No me gustan mucho esos reflexivos: se cobró, cobrársela.
Timba clandestina
SÍES
-Me gusta el título, sobre todo porque te predispone a pensar en otro tipo de partida mucho menos inocente y se agradece la sorpresa.
-Me encanta el final (aunque no tanto la construcción de la frase).
-Perfectamente encajado en el texto el tema elegido.
NOES
-Aunque me gusta el punto fantasioso de la trama, lo veo un tanto exagerado a veces (¿picas en cuaquier rama?).
- La redacción de algunas frases, cuando menos, es sospechosa.
Le daré mi voto, con todas las dudas del mundo, a Una buena mano.
Me gusta mucho esta Timba clandestina; claro que, a mí, con una pizca de fantasía, se me tiene ganao; soy así de simple. Quizás no me convenza tanto el desarrollo. Una buena mano se me ha hecho complicadillo de entender. Esa gran frase me ha exigido varias lecturas, me temo. (O yo, que soy muy corto, que también es una posibilidad)
Una buena mano es un micro de una sola frase, demasiado larga. Un punto y seguido tras La Gran Partida haría el micro más fácil de leer, seguido de un Pondría en juego. No está mal, pero este micro no me entusiasma demasiado
Timba clandestina me ha encantado. Esa metáfora de las cartas con el juego amoroso prohibido (¿entre hermanos? uy uy uy
) me ha encantado. Muy bien escrito.
Como ya imaginais, mi voto va para Timba clandestina.
¡Felicidades, Letripedia! (¿De nuevo? Madre míaaaa, ¡qué máquina!)
Bombardino: ¡qué bien has jugado con el doble sentido! :D
Timba clandestina me ha parecido un micro encantador. Un poco forzado el escondite de las picas pero el conjunto del relato, con una enorme dosis de creatividad, lo colocan, en mi opinión, por encima del de su rival, Una buena mano, que, aunque juega muy bien con los dobles sentidos, tiene una redacción un poco enrevesada.
Dos muy buenos relatos. Pero tinta clandestina me gustó un poco más. Sobre todo porque es más abierto, da lugar a la imaginación. Te deja pensando. De todas formas, otro desafío parejo.
¡Gracias a todos por vuestros comentarios!
Todos me sirven para mirar mi micro con lupa y ver cuales son sus puntos débiles y sus puntos fuertes.
Coincido, el escondite de las picas está forzado. Podría haberle dado otra vuelta y buscar uno más adecuado.
Lo bueno de todo esto es lo que se aprende. Y también que a pesar de que me pisaron con los cascos de los caballos, se me calló la armadura, y se me rompió la uña del índice, sigo en pie.
Saludos!!
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