Illius

Reseña de la novela de Raúl Ansola que publica Grupo Ajec en su colección Albemuth con el número veintiocho.

Una espiral es, probablemente, el símbolo que mejor definiría este libro, o más bien la historia que encierra. La cosa empieza con arcos amplios: conocemos a una serie de personajes y nos vamos familiarizando con su día a día. Luego, esta rutina se va viendo salpicada por pequeños detalles inquietantes que, poco a poco, van cambiando la trayectoria de las cosas hasta que la acción se precipita por un sumidero que nos lleva a cotas más profundas de lo que hubiéramos imaginado.

No voy a revelar nada de la trama de Illius. Es una novela que funciona mucho mejor cuando el lector la encara sin saber hacia dónde va a ir la cosa. Sólo me permitiré apuntar que en ella se juguetea con lo que se denomina, grosso modo, paranormal: supuestos aparecidos, fenómenos extraños y esas cosas. Que nadie se espere, no obstante, ningún posicionamiento: las interpretaciones son tantas como los personajes, y las cosas, como en un libro fantasmagórico, no son lo que parecen (o a veces sí).

La narración, de hecho, se desarrolla en base a un planteamiento policíaco - amateur. Los protagonistas, que buscan esclarecer un detalle tan inocuo como inquietante, son gente corriente, y se comportan como tales. El tratamiento de estos personajes es, sin duda, uno de los aciertos del libro: sus motivaciones nos resultan tan creíbles como cercanas. Los trasfondos y emociones de dichos protagonistas ocupan, asimismo, un papel primordial en la novela.

El estilo en el que ésta se ha ejecutado es remarcable. Raúl Ansola tiene una prosa con carácter propio, y no duda en arriesgarse estructuralmente. Es cierto que algunos pasajes resultan algo densos (es normal tratándose, como decíamos, de una espiral), pero en líneas generales es otro gran acierto, porque dan un carácter muy personal a la historia, y un enfoque muy curioso. Se genera, además, esa sensación de puzzle completándose que resulta tan satisfactoria cuando se conduce bien.

Finalmente, cabe comentar que el conjunto engancha también con esa mezcla entre anécdota entre amigos e historia de campamentos aun sin apoyarse en la inquietud de los elementos terroríficos.

Autor

Raúl Ansola, nacido en Barcelona en 1977, es un autor que no deja indiferente con sus escritos, ni tampoco con sus otras actividades. Escritor, guionista, director de cortos… ha sido finalista de diversos certámenes de cortometrajes por sus guiones («Buscándote», Festival de Islantilla; «La noche que Eric se quedó solo», Festival de Cine Florian Rey y Festival de Calasparra). Pero en la literatura ha conseguido hasta ahora sus mayores logros, entre los que destaca el ser finalista del certamen de novela corta Cristóbal Zaragoza en 2008 por «El Concierto», así como ganador y finalista de gran cantidad de concursos literarios de relatos. Illius es su primera novela publicada.

Sinopsis

La investigación de un suceso aparentemente paranormal -una anomalía en una fotografía- llevará a los implicados a descubrir terribles secretos que provienen de su pasado olvidado.

Edición

Illius

Raúl Ansola

Grupo Ajec, 2009

Colección Albemuth

Rústica con solapas

Conclusión

Un libro escrito con mucho acierto y con estilo propio, considerablmente cinematográfico, que rescata ese escalofrío de las historias de campamentos pero estirándolo como un hilo de Ariadna para introducirnos en un laberinto mucho más ambicioso y amplio, amén que enrevesado. Una lectura que plasma la investigación de algo que se sale de los límites de lo cotidiano por gente común.

Nota.- como anécdota, comentar una curiosa errata (de las pocas que había) que me llamó mucho la atención: el uso de "deparar" (suministrar, proporcionar, conceder) por "reparar" (advertir).