Las setas no sangran y otros hongos terroríficos

Imagen de Patapalo

Reseña de la antología de relatos de Brian Lumley publicada por Ediciones Jaguar

Este libro es una magnífica ventana abierta a la literatura de terror anglosajona: nos presenta relatos premiados con sus galardones más prestigiosos, nos acerca historias que se publicaron originalmente en las míticas páginas de Weird Tales o Superhorror, y, además, nos trae como cicerone al propio Brian Lumley, quien confeccionó la antología y redactó el prólogo general y la presentación de cada relato incluyendo anécdotas sobre su escritura y publicación. Es, además, una muestra de un tipo de literatura de terror muy concreta y sobre la que el título nos da alguna pista: aquí no va a haber gore, sino historias que enraízan en la tradición gótica de crear atmósfera y sugerir, sin demasiados golpes de efecto, pero que no se quedan anquilosadas en su bagaje histórico.

De este modo, en las páginas de “Las setas no sangran y otros hongos terroríficos” encontramos historias que podrían entroncarse en los Mitos de Cthulhu -de los cuales Lumley está considerado uno de los más dignos sucesores-, como podrían ser el estremecedor Nacido de los vientos, el curioso díptico epistolar formado por La caracola chipriota y La concha de las profundidades, El espejo de Nitocris -donde Lovecraft está más que presente- o mi relato preferido de la antología: Reconocimiento, una historia sobre casas encantadas que consigue mantener esa sensación de vello erizado tan propia de M.R. James.

 

No obstante, ésta no es una antología de homenaje al terror clásico, y ya estos propios relatos tienen un ritmo muy actual y fresco. Es algo que queda todavía más claro en obras como “El hombre que fotografiaba a Beardsley”, muestra de cómo se puede escribir un relato bien macabro sin efectismo, “El viaducto”, ejemplo de cómo extraer el terror de la sencillez del día a día en cantidad suficiente para tener al lector pegado a las páginas del libro sintiendo una angustia total, el perturbado “Sin retorno a casa”, cuyo cierre recuerda a algunos delirios de Clive Barker, o el simpático y extravagante “Los delgados”, que funciona muy bien gracias al escenario y el tono inglés que rezuman los personajes.

 

Este recurso del retrato social, en el que se muestra particularmente hábil el autor, brilla con especial fuerza en el relato bandera, “Cuerpos fructíferos”, cuya trama rebosa originalidad y esa habilidad para dar a la quietud un toque espeluznante. La instantanea de “El picaminas”, que nada tiene que envidiar a obras más académicas -como “Las cenizas de Ángela”- también enhebra con particular acierto el recuerdo de infancia con el horror más cotidiano.

 

“Necros” hace de contrapunto a estos dos grandes bloques con la recuperación de un eco legendario con ciertos toques de vampirismo, y “El hombre que sentía el dolor” nos permite constatar que Lumley es capaz de extraer horror incluso en el terreno de la ciencia ficción.

 

El conjunto, que da cierta sensación de caprichoso viaje por zonas oscuras a causa del orden impuesto por el autor, es de una considerable riqueza y una buena muestra del oficio de este autor que se ha ganado el título de maestro del terror. Muestra, también, de que la escuela puede ser vieja, pero no está muerta y sí que tiene mucho que decir todavía.

 

Autor

 

Brian Lumley es una de las voces más interesantes y prolíficas del actual género de terror. Nació en el noreste de Inglaterra, cuyos ambientes brumosos le han servido de inspiración para sus relatos. Sus aportaciones a la saga de Los mitos de Cthulhu le han convertido en uno de los más reputados continuadores de H. P. Lovecraft. Lumley es además creador de personajes como Titus Crow, cuyas aventuras cuentan con numerosos seguidores, así como de la exitosa serie de novelas Necroscope.

 

Sinopsis

 

Una recopilación de relatos de toda la trayectoria del autor que incluye “Cuerpos Fructíferos”, premiado con un British Fantasy Award.

 

Edición

 

Las setas no sangran y otros hongos terroríficos

Briam Lumley

Ediciones Jaguar, 2008

Colección La Barca de Caronte

Rústica con solapas

 

Conclusiones

 

Esta antología es una buena lectura de terror sugerido y de atmósfera. El sugerente escalofrío de los grandes clásicos está entre sus páginas escrito con un estilo mucho más actual y animado. No se trata de un terror sangriento ni traumático, sino de ése que se degusta en una tarde de tormenta en un buen sillón.

 

Además, se trata de una buena muestra de lo que se cuece en estas publicaciones que siempre hemos mirado con anhelo desde nuestra piel de toro, como la Weird Tales, por lo que el interés de los propios textos aumenta con la contextualización que hace el autor de los mismos.

Espacio patrocinado por

Nocte - Asociación Española de Escritores de Terror

http://www.nocte.es/

 OcioZero · Condiciones de uso