Hijos de Peter Pan (CF)

36 posts / 0 nuevo(s)
Ir al último post
Imagen de Patapalo
Patapalo
Desconectado
Poblador desde: 25/01/2009
Puntos: 208859



Llegó el futuro que miles de generaciones de pacifistas habían soñado, el Reino de los cielos que denominaron otros. Abolidos los ejércitos, olvidadas las guerras, repudiado el trabajo y sin necesidad de responsabilidades, sólo quedó el disfrute hasta el hartazgo.

 

Cupido entró en el local silbando una tonadilla melancólica. Hacía días que no conseguía despegársela y tenía la impresión de que estaba minando algo en su interior. No obstante, cuanto más pretendía luchar contra ella, con más insistencia volvía a sus labios. Al final, decidido a obtener al menos una victoria pírrica, concluyó que lo mejor sería sentarse a charlar con alguien.

Como marcaban los cánones del firmemente instaurado estilo neopanhelénico, la sala estaba articulada en torno a un impluvium artificial que los visitantes podían utilizar a modo de piscina. Alrededor del mismo se habían creado varios espacios, más o menos relajados e íntimos, para que la gente se dispusiese en grupos o en solitario. Las trampillas de distribución de bebida y comida salpicaban el suelo por doquier para evitar que la gente se congregase en puntos estratégicos echando a perder el conjunto.

Tras un rápido vistazo, Cupido se dio cuenta de que, a pesar de la aparente variedad étnica y de vestimenta, sus posibilidades eran más bien reducidas, así que se acercó a un grupo indeterminado de gente en el que, aparentemente, predominaban las mujeres.

—Salud para todos saludó alzando la mano lánguidamente, mi nombre es Cupido.

—Eros respondió un mulato ataviado con un colorido y amplio conjunto de corte neoafricano—. Siéntate con nosotros y comparte nuestra conversación.

Dos muchachas gemelas, de marcadas facciones orientales y vestidas con vistosos conjuntos de plumas y pieles de cebra, le tendieron sonrientes un par de cuencos, uno con una densa bebida anaranjada y el otro con gajos de cítricos. Cupido los tomó complacido.

—Debatíamos intervino un joven de cabellos rizados que estaba totalmente desnudo y ebrio sobre el nuevo tren intercontinental. Al parecer circula demasiado rápido para poder disfrutar del viaje. Hay quien opina que, precisamente por ello, garantiza el derecho universal a viajar.

Cupido se dio cuenta rápidamente de que la conversación estaba bien avanzada y las posiciones afianzadas. Tal vez su opinión permitiera darle un nuevo enfoque al viejo tema del medio y el fin.

—El derecho al viaje es totalmente absurdo terció una robusta mujer cubierta de tatuajes cuando el mundo entero se ha convertido en una copia de sí mismo. ¿Qué interés tiene ir hasta Shangai si allí encontraré lo mismo que en Toulouse? En otros tiempos la gente tenía amigos, gente a la que apreciaba por encima de los demás y que justificaba la necesidad de viajar. También tenían vínculos familiares.

La mayor parte del grupo rió alegremente, como inconscientes campanillas. Las referencias a los tiempos antiguos solían resultar jocosas en sí por lo incomprensibles que resultaban.

—Bueno intervino Cupido dispuesto a dar, como de costumbre, una nota picante a sus conversaciones, en aquella época existían otros viajes que no eran de placer.

—Sí, claro le secundó el muchacho desnudo dedicándole una mirada lasciva—; las investigaciones científicas, los trabajos, las guerras y todas esas cosas enumeró vagamente sin tener muy claro el significado de esos conceptos. ¡Qué suerte haber nacido en esta época en la que no hay que trabajar! exclamó con fingido alivio—. ¡Benditos robots que nos dejan todo el tiempo para lo que cuenta!

—Bueno, los robots no lo hacen todo solos terció con candidez una de las gemelas para captar la atención, de nuevo, del joven desnudo. También están los científicos.

—Ya, como los del estudio de las sombras interrumpió Eros desatando una carcajada general. Después, a los gritos animados de “cuéntala de nuevo”, el mulato entonó por tercera vez en aquella velada la historia que había leído, semanas atrás, en una revista divulgativa. Resulta que un grupo de científicos ha descubierto que las sombras no son un efecto físico, sino un parásito que nos succiona la luz circundante. ¿No es escalofriante?

Cupido sintió, al terminar la breve anécdota, cómo su desazón aumentaba. Era la misma sensación que le había causado la persistente tonadilla. Era una impresión vaga que le corroía por dentro. Después de beber un largo sorbo de su cuenco de bebida anaranjada se animó a luchar contra esa sensación de un modo activo.

—¿Y no creéis que alguien debería hacer que estudiasen cosas más importantes?

Como si aquello hubiera sido un chiste, todo el grupo estalló en carcajadas.

—No entiendo qué quieres decir comentó el joven desnudo mientras, al mismo tiempo, se reclinaba sobre una de las gemelas para besarle suavemente en el cuello. Arte y disfrute entonó con un cierto histrionismo antes de arrebatarle de un mordisco una pluma a su pareja. ¿Por qué no sería importante estudiar a las sombras? Su oscuridad es una forma de arte. O de ausencia de arte.

—No sé terció Eros para seguir escuchando su propia voz, para notar su efecto estético sobre el auditorio. Los robots se encargan de la comida y ya no se han vuelto a detectar casos de agresividad desde hace un siglo. ¿Qué podríamos necesitar investigar?

Cupido, aunque se sentía de acuerdo de un modo racional con la idea expuesta por el joven, sentía que algo no encajaba. Algo no iba bien. Algo no iba bien con la tonadilla. Algo no iba bien en su cabeza. Algo no iba bien en el mundo.

Echó una mirada a su alrededor para buscar un ejemplo más tangible, algo en lo que sostener su tesis, pero el local neopanhelénico no daba muchos asideros. La gente semidesnuda, las columnas imitando el estilo griego, los infatigables distribuidores de comida y bebida, los vomitorios, los jóvenes retozando sin complejos, los animales, ni salvajes ni domesticados, remoloneando en torno a los hombres, las suaves ondas en la piscina cubierta de nenúfares… nada parecía cuestionable.

El suyo era un mundo sin crímenes, sin trabajos, sin preocupaciones. Sólo arte y disfrute. Libre, sin límite ni cortapisas. Pero aquella tonadilla no iba bien.

—Bueno, tal vez deberían estudiar enfermedades aventuró. Es lo que hacían antes los científicos.

Eros, que era ya prácticamente el único interesado en el tema, se le acercó un poco más y le dio de comer un gajo de naranja mientras le decía, algo burlón:

—No serás de ésos que cree que la gente no vuelve de los tanques de recuperación... Y después, como queriendo mostrarse conciliador, por si ésa fuera la realidad, añadió—: hay que tener en cuenta que es raro volver a encontrar a la misma persona después de un tiempo. Todo el mundo se mueve, cambia de ambientes. No es que los robots los reciclen en salchichas.

Cupido bebió un poco más del liquido anaranjado antes de intentar retratar lo más nítidamente posible aquello que le molestaba.

—Tengo la impresión de que erramos sin sentido. ¿Realmente cambiamos de ambientes? El mundo ofrece lo mismo en todos lados. La gente parece cogerle más cariño a los monos exclamó al ver a un macaco que se acercaba al grupo que a los otros seres humanos. Una cara para cada noche citó el refrán popular.

—¿Y tú querrías ser mi cara de esta noche? le invitó Eros algo aburrido ya de la divagación filosófica. Como buen hombre de su tiempo, al mulato le resultaba complicado centrar su atención demasiado en un tema. Por eso sus anécdotas eran cortas, acordes a su personalidad voluble.

Cupido, por el contrario, no conseguía abandonarse a ese placentero cambio perpetuo dentro de la jaula de oro. No desde que la melodía melancólica se instalara en su cerebro con una perseverancia que ya no existía en ningún campo de su civilización. Incapaz de desterrar la desazón de su ser, se levantó y abandonó a sus recién conocidos acompañantes.

—Salud para todos. Creo que me voy a retirar dijo con una lánguida nota de tristeza en la voz.

Eros, sin perder la sonrisa por un instante, se volvió hacia el escalón en el que el joven desnudo retozaba con las gemelas. Sin sentirse apenas contrariado por el rechazo del otro joven, se unió al trío.

En las terrazas exteriores hacía un poco de frío, por lo que Cupido decidió buscar un lugar cubierto donde dormir, o al menos donde tumbarse. Hacía mucho tiempo que los espacios privados se habían abolido. Dado que el servicio de limpieza prestado por los robots era comunitario, no tenía sentido conservar viejos conceptos como la propiedad particular. Desde hacía siglos, la gente dormía en donde le venía en gana. Algunas veces tenían pesadillas en las que monstruos les atacaban, pero no era algo que no se pudiera solucionar con un cambio de dieta y algunas distracciones. Después de todo, hacía mucho tiempo que no se detectaban comportamientos violentos. ¿A qué servirían, si todo estaba disponible para todo el mundo?

Todavía acosado por el influjo de la pegadiza melodía melancólica, Cupido se subió las solapas de la chaqueta y comenzó a descender unas escaleras. Al poco rato decidió cambiar de camino: un pequeño macaco golpeaba con saña un coco contra los escalones, los ojos brillando en la oscuridad. Por un momento, al ver al animal, sintió cómo la desazón se acrecentaba en su pecho. No hubiera podido decir por qué, pero tenía la impresión de que aquel simio tenía algo de lo que el carecía. Y era algo mucho más relevante que un coco.

Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.

Imagen de Victor Mancha
Victor Mancha
Desconectado
Poblador desde: 26/01/2009
Puntos: 1798

Bienvenido, Patapalo.

Participas en la categoría de Ciencia Ficción.

Recuerda que si quieres optar al premio del público o a su selección debes votar al menos una vez (punto 9 de las bases).

En este hilo te pueden dejar comentarios todos los pobladores. Te animamos a que comentes los demás relatos presentados.

Si tienes alguna duda o sugerencia, acude al hilo de FAQ´S y en caso de que no encuentres respuesta puedes señalarla en el post correspondiente.

¡Suerte!

Imagen de Nemeck
Nemeck
Desconectado
Poblador desde: 24/05/2009
Puntos: 20

Muy chulo

Imagen de Patapalo
Patapalo
Desconectado
Poblador desde: 25/01/2009
Puntos: 208859

Gracias :-)

Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.

Imagen de Ninotchka
Ninotchka
Desconectado
Poblador desde: 08/05/2009
Puntos: 644

Me ha gustado, sí señor  y eso que el género no es lo mío... pero me ha parecido tan bien llevado... Una gozada leerlo

Imagen de Patapalo
Patapalo
Desconectado
Poblador desde: 25/01/2009
Puntos: 208859

Muchas gracias, compañera. Es todo un elogio viniendo de quien viene :-)

Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.

Imagen de palabras
palabras
Desconectado
Poblador desde: 26/01/2009
Puntos: 4284

Pues este también lo leí

Decirte que me gustó en terminos fenerales, aunque sentí que me faltó algo en la charla, y el final, sin desagradarme me pareció algo flojo (aunque me viene pasando con casi todos tus finales, así que tiene que ser cosa mía, ejeje)

Un abrazo. Nos leemos.

Imagen de Patapalo
Patapalo
Desconectado
Poblador desde: 25/01/2009
Puntos: 208859

No te creas: en muchas ocasiones mucha gente distinta me ha comentado lo de los finales. Desde luego, no son mi punto fuerte, y es un problema porque para muchos lectores es lo más importante.

Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.

Imagen de Yandros
Yandros
Desconectado
Poblador desde: 10/06/2009
Puntos: 92

Vaya vaya todo un mundo mitológico al estilo del Olimpo griego, la Sociedad del Bienestar por excelencia o el paraíso que lo llamarían algunos.

Y que sensación de fracaso nos deja este status quo en el que todo es inamovible y nada cambia

¿No es como si todo estuviera muerto?

Genial relato, un abrazo y suerte!

Imagen de Patapalo
Patapalo
Desconectado
Poblador desde: 25/01/2009
Puntos: 208859

Muchas gracias por el comentario. Me alegra que, al menos, haya dado que pensar. Me gusta la cifi distópica, qué duda cabe.

Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.

Imagen de solharis
solharis
Desconectado
Poblador desde: 26/01/2009
Puntos: 21906

¿Cuánto ha pasado desde que te leí este relato? Me dejó entonces la misma sensación de decadente tristeza que me llevó a imaginar que eras una persona más bien melancólica (nada más lejos de la verdad).

Me gustó mucho y es que recordaba hasta el título. Raramente lo hago.

Imagen de Patapalo
Patapalo
Desconectado
Poblador desde: 25/01/2009
Puntos: 208859

Supongo que es porque el título es bastante peregrino. Sí, recuerdo que me comentaste en una incursión a Madrid lo de que me imaginabas más melancólico... bueno, algo hay siempre, como en todo

Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.

Imagen de Léolo
Léolo
Desconectado
Poblador desde: 09/05/2009
Puntos: 2054

Brillante alegoría de la eterna confrontación entre el espíritu apolíneo y el espíritu dionisíaco en un ambiente clásico/futurista que. por otro lado, nos remite al eterno retorno de Nietzche. Por todo ello, creo que me ha recordado al pensamiento utópico que buscaba Kubrick en su 2001 (aunque esto son ya palabras mayores... ).

En definitiva, aparte de la melancolía que destila, me trae a la mente una de mis máximas preferidas:

"La violencia está subestimada en la sociedad actual".

De nuevo, un placer leerte. Un saludo!

P.D. Es curioso que menciones Toulouse en este relato, pues acabo de regresar de conocer la ciudad ayer mismo

Imagen de Patapalo
Patapalo
Desconectado
Poblador desde: 25/01/2009
Puntos: 208859

Me alegra que se haya visto por dónde va la reflexión. Muchas gracias por el comentario. Los toques de ambientación franceses son recurrentes en mis relatos, por otra parte; la cabra, que tira al monte :-)

Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.

Imagen de MaiV
MaiV
Desconectado
Poblador desde: 11/07/2009
Puntos: 79

Me gusta, muy bien ambientado y narrado... solo el final me ha dejado con una sensación un poco rara, como si faltara una explicación más extensa.

 

Saludos,

MaiV.

Imagen de Patapalo
Patapalo
Desconectado
Poblador desde: 25/01/2009
Puntos: 208859

Es algo recurrente, que mis finales dejen una sensación extraña Me alegra que el resto del relato te haya gustado. Gracias por el comentario.

Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.

Imagen de iulius
iulius
Desconectado
Poblador desde: 13/05/2009
Puntos: 651

Buena ambientación y buen pulso narrativo. Enhorabuena :O)

Imagen de Patapalo
Patapalo
Desconectado
Poblador desde: 25/01/2009
Puntos: 208859

Muchas gracias

Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.

Imagen de Imaka
Imaka
Desconectado
Poblador desde: 29/06/2009
Puntos: 231

Comentar que el final no me ha parecido tan flojo, como otros comentan. Justamente el final es el que realmente te abre a la reflexión de lo expuesto en el relato.

Suerte!

Imagen de Patapalo
Patapalo
Desconectado
Poblador desde: 25/01/2009
Puntos: 208859

Pues te agradezco el comentario un montón, Imaka. Desde luego, la intención es que sirviera de detonante, de pieza final que termina de centrar la idea subyacente de la historia. Me alegra que a alguien le haya funcionado.

Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.

Imagen de Ajimalayo
Ajimalayo
Desconectado
Poblador desde: 03/08/2009
Puntos: 41

Pues a mí también me ha gustado. Además, un poco de humor siempre se agradece.

Claudio Guillermo del Castillo Pérez

Imagen de Patapalo
Patapalo
Desconectado
Poblador desde: 25/01/2009
Puntos: 208859

Gracias por el comentario. Supongo que en la cifi casi me interesa más el lado humano que el espectulativo, aunque sea un arma de doble filo.

Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.

Imagen de nestordarius
nestordarius
Desconectado
Poblador desde: 16/07/2009
Puntos: 93

Buen cuento, Patapalo! Me ha gustado. Lo único: no encuentro mucha relación entre la ambientación helénica y el título, como que "Peter Pan" no suena mitológico que digamos... Pero muy bien llevada la angustia distópica del prota. Con respecto al final, para mí también está bien. Es abierto y reflexivo, denota resignación, la misma resignación con la que el prota descubre que no podrá despegarse la melodía pegajosa que le suena desde el principio. Tal vez estaría bueno que el comentario introductorio (necesario, vale) no fuera tan rimbombante, porque te pone sobreaviso, como que suena  a mucho lugar común, minimizando el efecto general del relato. Tal vez si fuera algo más difuso... No sé. Igual, felicitaciones!!! Aguante la CF distópica ;-)

Néstor Darío Figueiras (Stratofan!!)

poeticoprofeticopoliedrico.blogspot.com

Imagen de Patapalo
Patapalo
Desconectado
Poblador desde: 25/01/2009
Puntos: 208859

Gracias por el comentario, nestordarius. El primer párrafo era la entradilla de enganche que preparé para su anterior publicación (en OcioJoven). Estuve por quitarlo en el concurso, pero me daba cierta pena nostálgica.

En cuanto a la ambientación, no es propiamente helénica aunque abunden las referencias, sino una extrapolación de un futuro posible -sufriendo una moda neohelénica en el momento del relato, por decirlo de alguna forma-. Quizás hubiera debido buscar una ambientación puntual más acorde con el título, que era realmente el motor de la historia: esas ganas de no crecer que nos entran a veces como civilización -y como individuos-.

Muchas gracias por los apuntes. Viene bien ver los relatos propios desde otros ojos, sobre todo tan atentos.

Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.

Imagen de Léolo
Léolo
Desconectado
Poblador desde: 09/05/2009
Puntos: 2054

Lo he vuelto a leer, y creo que si no es el mejor, desde luego sí es uno de mis favoritos para este certamen. Es una ciencia ficción melancólica tratada con originalidad y con una sobriedad encomiable. Uno de esos escritos que da "envidia" no ser su autor...

Felicidades de nuevo, Patapalo.

Imagen de Tormenta
Tormenta
Desconectado
Poblador desde: 03/08/2009
Puntos: 89

¿No habrás oido hablar del proyecto Venus, verdad? hasta que he leído este relato basaba mis pequeñas esperanzas utópicas en él, después de leerme esto ya no sé si fiarme mucho :P

Otro relato genial de tu cosecha, me ha encantado. Comparto la opinión de es justo el final lo que abre la reflexión  más amplia de lo que cuentas.

 

Mucha suerte.

Imagen de Patapalo
Patapalo
Desconectado
Poblador desde: 25/01/2009
Puntos: 208859

Pues no he oído hablar del proyecto Venus, no, pero ahora me tienes intrigado. Ya contarás de qué va el tema. ¿Es un proyecto real?

Muchas gracias por los comentarios. Siempre dan muchos ánimos.

Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.

Imagen de LCS
LCS
Desconectado
Poblador desde: 11/08/2009
Puntos: 6785

Puede que no sea un relato tradicional, con un final concluyente y definitivo, pero eso no significa que no sea un buen relato y un buen final abierto, de esos que te dejan pensando.

Gracias a la atmósfera que has creado, se respira la melancolía.

 

Tengo que felicitarte de nuevo.

Imagen de Patapalo
Patapalo
Desconectado
Poblador desde: 25/01/2009
Puntos: 208859

Muchas gracias. Me alegra que el relato esté gustando.

Parte de la sabiduría consiste en saber ignorar algunas cosas.

Imagen de mafalda
mafalda
Desconectado
Poblador desde: 21/05/2009
Puntos: 26

Lo considero uno de los posibles ganadores por dos cosas principalmente: la primera es lo bien escrito que está y lo bien que está llevada la historia, y la segunda la historia en sí, por el poso que deja después de leerlo.  Al rato te das cuenta de que sin querer estás pensando en él,  analizándolo y pensando en la raza humana, me parece que el cuento gana con el paso de los minutos. Aún así, considero que deberías contar más e insinuar menos.

Un besito.

Imagen de Tormenta
Tormenta
Desconectado
Poblador desde: 03/08/2009
Puntos: 89

Patapalo, sobre el Proyecto V, sí que es un proyecto real, ahora mismo planteado desde una visión más bien educativa. Yo me enteré de su existencia, como casi la mayoria imagino, viendo el documental Addedum, la segunda parte de Zeitgeist  En tu relato hay muchas cosas que me lo recordaron porque habla basicamente de lo más visible de cara a la galeria del tema, de una sociedad mundial en la que  la tecnología haya evolucionado hasta el punto de que los humanos no necesitemos trabajar; también me resultó muy curioso el tema de los científicos  una figura que también aparece en el proyecto... aunque bueno, tú vas bastante mas allá :)

Suerte de nuevo, tu relato la merece

 OcioZero · Condiciones de uso