Nigromancia en el reformatorio femenino

Imagen de Patapalo

Reseña de la novela de John Tones publicada por Alegoría en la colección Memento Mori

Rituales sangrientos y carne juvenil, ese es el subtítulo y de eso va esta novela: pulp desenfadado, con un punto gamberro, un ritmo trepidante y una trama hiperbólica que se cierra en el último momento, como mandan los cánones. Una obra en clave pulp de un amante del pulp.

Y diNigromancia en el reformatorio femeninogo en clave pulp más que pulp a secas porque Nigromancia en el reformatorio femenino tiene varios elementos que pueden poner algo de distancia con el pulp histórico: consciencia de sí misma, un buen puñado de guiños al lector y, sobre todo, una prosa de calidad. Respetuosa con lo que homenajea, eso sí, porque no se trata de desvirtuar el género sino de volver a visitarlo pero con algunas lecciones aprendidas.

Así, por un lado permite disfrutar de una trama algo disparatada ambientada en unos Estados Unidos que tienen más de película que de realidad histórica, de unos toques de erotismo carcelario —femenino, claro—, de unas escenas de acción con sus vaciladas y sus fantasmadas y de unos personajes descarados y carismáticos. Y, por otro lado, viene apuntalada por el bagaje de John Tones, que no se adivina precisamente escaso: el trasfondo de sectas tiene más enjundia que las meras túnicas, la propia concepción del reformatorio está muy bien cimentada y los detalles que van quedando por ahí para los amantes de los cómics, del cine o la literatura dejan con muy buen sabor de boca. Además, las piezas del puzle terminan encajando y todo tiene sentido más allá del espectáculo estético que supone.

Eh, pero sin perder de vista que esto es pulp: Nigromancia en el reformatorio femenino no es una novela erudita para regodearse en un pasado idealizado del género, sino una oportunidad de sumergirse en ese género reinventado y pasar un rato de lectura distendida en el que se alterna la tensión con las sonrisas torcidas y las sorpresas.

En definitiva, John Tones es uno de esos autores que están dando una nueva vida a una forma de entender la literatura de terror que nació en una coyuntura editorial concreta y que nos ha dejado muy buenos recuerdos y algunos náufragos de mucho mérito. Y Memento Mori, la colección de Alegoría, lo pone a huevo para darle una oportunidad. Al buscar la imagen de la portada para el artículo he visto que tienen la novela a 3 euros en su web. Precios populares, como el pulp de en tiempos.

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