En el blanco

Imagen de jspawn

Reseña de la novela de Ken Follett

He leído por ahí que esta obra es muy buena, que es una obra maestra, que el autor reinventa el género con cada uno de sus libros, etc. Y he de decir que es la primera obra que me he leído de él. Y su lectura no me invita, especialmente, a comulgar con su aclamada Los Pilares de la Tierra.

 

Lo que sí tiene esta obra es acción, pero la acción se puede presentar de dos maneras: con verosimilitud y sin verosimilitud. Y ésta, me temo, es de la segundas. A mí me recuerda a las películas de Steven Seagal en que el protagonista, que no sé si llamarlo, personaje o directamente emblema, es super bueno, super guapo y super inteligente.

 

Pero, dejando aparte guiños con películas de sobremesa de tres al cuarto, he de decir que la prosa de este autor es llana, sosa y muy predecible. Le falta madurez léxica y madurez narrativa.

 

Los personajes, típicos y tópicos, dejan ver su mezquindad con los tacos injustificados propios de lo estandarizado de la sociedad americana por los medios de comunicación. Y el tema, cómo no: un virus mortal. Demasiado manido para la sobreinformación que tenemos actualmente.

 

No obstante, la novela ha triunfado, según ciertos críticos, lo que me lleva a pensar que sí: que no toda la sociedad está hecha para la misma literatura o viceversa.

 

Sinopsis

 

Oxenford Medical, empresa farmacéutica escocesa dedicada a la investigación de vacunas contra los virus más peligrosos, se dispone a pasar las fiestas navideñas bajo un temporal de nieve. La empresa cuenta con los sistemas más avanzados de seguridad, de modo que, a pesar de algunos sustos, nadie espera ninguna incidencia. También Stanley Oxenford, propietario de la empresa, se dirige a su casa a pasar la noche con sus hijos. Los problemas entre ellos acabarán estallando, pero pronto quedarán olvidados: sin saberlo, todos ellos iban a vivir un infierno.

 

Porque justamente esa noche se produce el robo de un peligrosísimo virus. Los ladrones, sin embargo, quedan atrapados por el temporal. En su errática huida, iban a llegar al peor sitio de todos...

 

Autor

 

El escritor británico Ken Follett nació el 5 de junio de 1949 en Cardiff (Gales), hijo de una mujer llamada Veenie y de un inspector de hacienda de nombre Martin Follett, ambos muy religiosos. Aficionado a la lectura desde niño, Ken devoraba los libros de la biblioteca pública de su localidad natal. En 1959 se trasladó con su familia a Londres, ciudad en la que terminó sus estudios secundarios antes de iniciar la carrera de Filosofía. En su periplo universitario se casó con su novia Mary, contrayendo matrimonio en el año 1967.

 

Tras realizar un curso de periodismo, Follett comenzó a escribir en los inicios de la década de los 70 como reportero para varios periódicos, entre ellos el galés “South Walles Echo” y el inglés “Evening News”. Al mismo tiempo desarrollaba su imaginación redactando sus primeros textos impulsado por su agente literario, Al Zuckerman.

 

Después de abandonar su faceta de columnista, Ken trabajó en una editorial antes de lograr el éxito con “La isla de las tormentas” (1979), un intenso thriller de espionaje (llamado también “El ojo de la aguja”) ambientado en la Segunda Guerra Mundial que se convirtió en su primer best-seller internacional. Con anterioridad había publicado varios libros con los seudónimos de Simon Myles (“The Big Hit”) y Zachary Stone (“El escándalo Modigliani”).

 

Más tarde aparecería “Triple” (1979), otra novela de espías con trasfondo político que cosecharía triunfales ventas, y que confirmó su valía como escritor de apasionantes intrigas. En la década de los 80 publicó títulos como “La clave está en Rebeca” (1980), “El hombre de San Petersburgo” (1982), “Las alas del águila” (1983), o “El valle de los leones” (1986). En 1985, divorciado de Mary, Follett contrajo matrimonio con Barbara Broer, miembro del Partido Laborista británico.

 

En 1989 apareció su mejor obra, “Los pilares de la tierra” (1989), un libro con el que el escritor galés variaba su habitual temática al desarrollar la acción en la Edad Media siguiendo la construcción de una catedral en el siglo XII.

 

En la siguiente década editó libros como “Noche sobre las aguas” (1991), en donde retomaba el suspense en el contexto de la Segunda Guerra Mundial, “Una fortuna peligrosa” (1993), centrando la historia en una familia de banqueros en la época victoriana, “Un lugar llamado libertad” (1995), novela de calado social sobre la esclavitud y la libertad ambientada en una comunidad minera escocesa del siglo XVIII, o “El tercer gemelo” (1996), historia de suspense en base a experimentaciones científicas recibida con diversidad de opiniones por sus seguidores, al igual que el thriller “En la boca del dragón” (1998).

 

“Doble juego” (2000) es un thriller centrado en un personaje en búsqueda de su identidad, “Alto riesgo” (2001) cuenta con el protagonismo de un grupo de mujeres en su período histórico favorito, la Segunda Guerra Mundial, época que retoma en “Vuelo final” (2002). Estos tres libros rebotan en las características de su obra, con atractivas y entretenidas intrigas narradas con intenso ritmo.

 

"En el blanco" (2004), título de suspense y drama familiar, cuenta los problemas de un laboratorio farmacéutico cuando se produce el robo de una droga antiviral. La segunda parte de su obra más célebre, "Los pilares de la Tierra", ya conoce una edición en inglés, "World without end" (2007). La versión en español, "Un mundo sin fin", llegará a las librerías a finales del mes de diciembre del año 2007. A través de sus páginas, la acción nos traslada al siglo XIV y a la ciudad de Kingsbridge para seguir los pasos de un grupo de amigos marcados por la visión en su infancia de unos asesinatos en un bosque.

 

Edición

 

Sello Editorial: Grijalbo

ISBN: 978-84-253-3915-8

Formato: Tapa dura

Medidas:155mm. x 237mm.

Año lanzamiento: 2005

Nº páginas: 480

 OcioZero · Condiciones de uso