El cementerio de los reflejos

Reseña de la novela de Silvia Ibáñez Cambra publicada por Grupo Ajec

Este libro llegó a mis manos sin querer. Entrando en una librería, lo vi en la mesa de novedades, la portada me gustó, el argumento que se desgranaba en la contraportada también y acabé llevándomelo a casa. Desde la primera página hasta la última te atrapa y no te deja escapar, sólo leer el primer párrafo es suficiente como para saber que lo que tiene que contar la autora va a gustar mucho, como podría decirse.

Tiene las justas descripciones de la ciudad, suficientes y no demasiadas. Los personajes es otro de los puntos fuertes de la novela. Miguel Campos es el protagonista de la historia y el que narra todo lo que va sucediendo. Desde su día a día, y los problemas a los que debe enfrentarse, como la muerte de su padre, para quedarse solo con su madre, con quien no se lleva especialmente bien, hasta la marcha de España durante la guerra, para regresar a una ciudad destrozada donde sus recuerdos y amigos más bien lo atormentan. Miguel, tiene una amiga más pequeña que él llamada Adelaida, que le da el toque de gracia a la novela; es pequeña, sabelotodo y muy despierta. Es ella quien le pide e insiste a Miguel que averigüe los motivos de porqué entierran a una joven, Adriana, en el mausoleo familiar de madrugada y sin que nadie se entere.

La investigación de esto se trunca con la guerra para retomarse tiempo después, a su regreso. Esta historia, aunque no lo parezca desde un principio, es el eje principal de la historia, con una trama increíblemente lograda, fascinante y que no deja un sólo cabo suelto al final, enlazando la historia que intenta descubrir sobre ese entierro con la suya misma. Es una novela fascinante, gótica, romántica e inolvidable. Me atrevería a decir que la palabra para definirla verdaderamente es “soberbia”. Es lo mejor que he leído desde hace mucho tiempo y me gusta tanto como cuando en su día leí La sombra del viento.

Desde aquí, me siento en la obligación de recomendar este libro a todo el mundo que le gusten las buenas historias, y la buena narrativa, que es otro punto a favor de la escritora: lo describe todo perfectamente bien, no te pierdes en ningún momento y tiene golpes de comedia también muy buenos que hace que sea más amena la lectura, así como los diálogos entre los personajes. Por entrevistas que he leído de la autora, ésta sería la primera parte de una trilogía. ¿Qué queréis que os diga? Estoy deseando tener la trilogía entera en la mano. La valoro con un diez sobre diez.